La Organización Mundial de la Salud ha tomado el caso de Argentina como uno de los ejemplos en la lucha contra el coronavirus y, desde diversos lugares del globo, se ha enaltecido el trabajo del Gobierno Nacional. Sin embargo, los editorialistas del Grupo Clarín siguen sin reconocer el trabajo de protección de Alberto Fernández y elevan la labor de la canciller alemana, Ángela Merkel, pese a que las estadísticas de muertes desafían toda la lógica.
En Clarín, el periodista macrista Ricardo Roa sostuvo en una columna de opinión que Merkel se lleva "la corona como líder contra el coronavirus" y aseguró que "hay una sensación mundial de que el virus mostró y muestra no sólo la eficacia de los sistemas de salud sino la estatura de los políticos a cargo". Sin embargo, lejos de ser una aproximación real, los datos revelan que en el territorio alemán -al miércoles 22 de abril- ya hay 5300 muertes por COVID-19 y hasta esa fecha es el octavo a nivel mundial con más fallecimientos.
La doble vara de Clarín queda marcada cuando, en Argentina, en la misma fecha se registraron en total 159 fallecimientos por la enfermedad. Incluso, los datos revelan que los primeros dos muertos en Alemania se produjeron el 9 de marzo mientras que el Ministerio de Salud argentino confirmó el primer caso mortal de coronavirus el 7 de marzo, es decir dos días antes que el gobierno alemán. Las estadísticas tiran abajo cualquier intento de operación, ya que en casi dos meses la nación europea sumó casi cinco mil casos mortales, mientras que en suelo argentino se pasó, en el mismo tiempo, la centena.
En el mismo sentido, Roa insistió con que Merkel "no hace arengas ni se envanece con un supuesto modelo alemán ni se compara con países vecinos" y que "comunica con rigor científico" en una clara alusión a los dichos de Alberto Fernández. Incluso, en la misma columna, sostiene que "Alemania afloja el aislamiento sin malvinizaciones". Sin embargo, los números le marcaron lo contrario.