Huérfanos de Brooklyn: lo nuevo de Edward Norton divaga en la nada misma

El segundo largometraje de Edward Norton intenta acercarse a los clásicos policiales de los años 50, con resultados penosos. Una chance perdida.

22 de noviembre, 2019 | 14.50

En el inicio, el espectador se encuentra con una secuencia atractiva, rápida, vertiginosa. Quienes conozcan la novela de Jonathan Lethem sabrán que Huérfanos de Brooklyn es un policial entretenido y muy cinematográfico. El actor Edward Norton pareció captar eso y adaptó el material obteniendo resultados desastrosos. La fórmula del policial clásico no se desarrolla de manera aceitada y la película peca de ambiciosa. El talentoso elenco hace lo que puede y la interpretación de Norton resulta molesta, ya que continuamente necesita aclarar que su protagonista padece una condición. Y no hace falta ser inteligente para darse cuenta.

Lionel Essrog (Edward Norton) es un detective particular, ya que sufre de síndrome de Tourette y eso hace que su convivencia con el mundo se torne complicada. Cuando su jefe (Bruce Willis) es asesinado por una banda mafiosa, Lionel buscará justicia bajo cualquier costo. Hasta acá todo bien; Huérfanos de Brooklyn es una mixtura entre el thriller de gangsters, el drama romántico y el policial clásico. Este cóctel provocativo, no seduce a nadie dadas las incongruencias dramáticas que se arrastran durante todo el metraje.

Para empezar, la actuación de Edward Norton provoca risa. Sí, nos reímos de algo de lo cual no habría que reírse y, casualmente, no es una comedia o un stand up de humor, donde los límites varían según el humorista. Sumado a esto, el protagonista no crece, estancándose en la interpretación "caja de cartón": cuadrada, correcta. Además, cualquiera que haga un archivo exhaustivo de la filmografía del actor sabrá que los personajes con trastornos mentales son su zona de confort más explotada.

Siguiendo el análisis, en Huérfanos de Brooklyn contamos con un abanico diverso de personajes secundarios mal desarrollados. Aparecen con convicciones y deseos fuertes, y a lo largo de la historia se desinflan como un globo. Un ejemplo claro es el personaje de Alec Baldwin, arquetipo temerario, con un final no acorde a su arco dramático. Una completa desazón, pues Baldwin ha sabido regalar interpretaciones que dan la talla en lo pedido.

Merece una mención especial la banda sonora, compuesta por originales de jazz, que evoca a lo mejor del cine de misterio. Un placer auditivo que compensa el pesar de lo visual.

Huérfanos de Brooklyn

  • Nuestra Opinión: Mala
  • Dirección: Edward Norton.
  • Elenco: Edward Norton, Alec Baldwin, Bruce Willis, Gugu Mbatha-Raw, Bobby Cannavale, Cherry Jones, Leslie Mann, Alec Baldwin y Willem Dafoe.
  • Guión: Edward Norton, basado en la novela de Jonathan Lethem.