Desde que el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, compartió en redes sociales el cuadro de Juan Manuel de Rosas que le regaló el presidente Alberto Fernández, se desató una insólita polémica azuzada por el macrismo tuitero.
Comenzó a circular la versión de que el Gobernador había presentado como obsequio un cuadro viejo, porque ya poseía en su despacho un retrato del Restaurador. Pero el nuevo cuadro fue pintado especialmente para el Gobernador y, aunque es similar, no es idéntico al que ya existía en La Plata.
Axel Kicillof había expresado su gusto por el cuadro en un encuentro con Alberto, y por eso el Presidente decidió mandar a pintar uno nuevo con el mismo artista plástico, con un marco totalmente distinto al anterior y otras dimensiones.
La Ministra de Comunicación Pública, Jesica Rey, publicó una foto de ambos cuadros para reírse de la polémica, al tiempo que pidió no perder tiempo en debates inútiles.