Felipe Solá habló hoy sobre la denuncia contra el senador nacional por Tucumán, José Alperovich, quien fue acusado de abuso sexual por una sobrina. En diálogo con radio La Red, Solá indicó: " El Senado hizo bien en brindar garantías a la denunciante. Si yo fuera Alperovich, pediría licencia para explicarme y esperar que se defina el tema".
El funcionario, quien suena como posible canciller de Alberto Fernández, se sumó a los dichos de la presidenta de la Banca de la Mujer del Senado, Norma Durango, quien declaró hoy que el senador del PJ debería "por lo menos tomar licencia si no renuncia". “Espero que él tome una decisión que nos evite a nosotros tener que compartir (el recinto con él) o tomar decisiones diferentes a las que se han tomado hasta ahora", sostuvo la legisladora en una entrevista con Futurock.
Por su parte, respecto del vínculo que desde el Frente de Todos mantienen con el papa Francisco y pese a las declaraciones del futuro mandatario a favor de la despenalización del aborto, Felipe Solá indicó. " Nuestra decisión es tener al Papa como guía en muchas cuestiones de la vida cotidiana".
También aseguró que la relación con el líder de la Iglesia católica "no se va a quebrar por el aborto". "Es muy profunda, nuestra decisión de tenerlo como guía en muchas cuestiones de la vida cotidiana es muy profunda también. Tenemos un Papa excepcional, de esa admiración no puede salir una mala relación".
El viernes pasado, la sobrina de Alperovich se presentó en los tribunales de esa provincia y en la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), en Buenos Aires. Sin embargo, el legislador negó "enfáticamente" los términos de la presentación y aseguró contar "con numerosas pruebas y testigos que demuestran" su "inocencia y la verdad".
La joven denunciante, de 29 años, a través de una carta abierta publicada por el diario La Gaceta de Tucumán contó los abusos que sufrió y dijo: "No escribo para convencer a nadie de nada. Estoy aquí contra la opresión del silencio y por la necesidad de recuperar mi vida, de sanar llamando a las cosas como son, sin suavizarlas ni teñirlas, poniéndole al monstruo nombre y apellido. Cuando no le ponés nombre, no existe".
En ese sentido, agregó: "El mío se llama José Jorge Alperovich, mi tío segundo y jefe, por quien fui violentada sexual, física y psicológicamente desde diciembre del 2017 hasta mayo de 2019. Durante un año y medio sufrí violaciones a mi integridad física y sexual. El avasallamiento fue demoledor. Tanto que ni siquiera pude ponerlo en palabras. Él oscilaba libre y cómodamente en los tres escenarios ante los que me posicionaba: el familiar, el laboral y el del horror de la intimidad que me forzaba a vivir con él", escribió según lo publicado por la agencia Télam.
Y relató: " No quería que me besara. Lo hacía igual. No quería que me manoseara. Lo hacía igual. No quería que me penetrara. Lo hacía igual. Inmovilizada y paralizada, mirando las habitaciones, esperando que todo termine, que el tiempo corra. Ya saldría de ahí y estaría en mi casa, ya habría más gente alrededor, ya el disimulo y el trabajo lo iban a alejar de mí", advirtió la sobrina del exgobernador.
La joven pidió que se impida al senador nacional salir del país. Alperovich, quien se encuentra con su familia en Miami, Estados Unidos, formuló un descargo a través de su cuenta de la red social Twitter, y le restó veracidad al relato de su sobrina. Como senador, tiene mandato hasta 2021.