El flamante gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, designó oficialmente a todos sus ministros peor hubo uno en particular que llamó la atención: en el caso del titular de la cartera de Salud, Daniel Gollán, lo hizo con referencias al "lawfare" o persecución política con medios judiciales.
Gollán está procesado en la causa por presuntos sobreprecios en la ejecución del plan Qunita, durante la gestión de Cristina Kirchner. Pero eso no fue motivo para que el ganador de los comicios del último 27 de octubre decidiera excluirlo del gabinete provincial y, en cambio, salió al cruce de la persecución realizada por el juez Claudio Bonadio.
En uno de sus primeros decretos como máximo mandatario provincial (el número 14, precisamente), Kicillof resalta que Gollán "ha declarado bajo juramento que se encuentra procesado en la causa judicial identificada como “CFP 6606/2015/TO1/13”, más conocida como causa Qunita. Al respecto, la designación destaca que se trata de una "injusta persecución penal" a la que encuadró como "lawfare”, "entendido como el uso indebido de instrumentos jurídicos para fines de persecución política, destrucción de imagen pública e inhabilitación, donde se combinan acciones aparentemente legales con una amplia cobertura de prensa".
Kicillof resaltó que la causa judicial por la que está procesado se dio "en el marco de un proceso de persecución política, judicial y mediática inédito en la República Argentina, desde el retorno a la democracia en 1983" y que ello "no puede implicar impedimento alguno o inhabilidad para que ningún ciudadano pueda cumplir una función pública".
El nuevo gobernador asumió formalmente este miércoles, cuando recibió los atributos de mano de la ahora ex mandataria María Eugenia Vidal. Ante la Legislatura bonaerense, Kicillof anunció que retrotrae el último aumento de luz del 25% dispuesto por Vidal para el Interior de la provincia de Buenos Aires.