Por Lorena Hak
Redacción El Destape
lhak@eldestapeweb.com
La caída del precio internacional de la soja y la devaluación que no llega -según los analistas no llegará con este gobierno- son indicios que advierten que "el 2015 será el peor año para el agro desde la rentabilidad y los márgenes brutos negativos", dijo el consultor agrícola a El Destape, Pablo Adreani.
La soja disponible cotiza en el rango de 270-273 dólares, luego de los 300 de diciembre pasado, y la posición marzo en el Mercado a Término (Matba) prevé unos 245 dólares, mientras que en la posición abril, la soja de la nueva cosecha está cotizando a 236 dólares. El panorama no es alentador para aquellos que decidieron retener la oleaginosa a la espera de una devaluación. Incluso, los expertos estiman que aún hay sin vender o sin fijar, más de 8 millones de toneladas de la cosecha anterior.
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"Siempre se retiene, y más con los K, que es incertidumbre permanente. El año pasado se retuvo y luego se devaluó, ahora en octubre-noviembre no hubo devaluación y se quedó la soja retenida. Esa retención se está achicando cada vez más, pero la soja va a seguir bajando", explicó Adreani. "Es una actitud psicológica y no económica. El nivel de incertidumbre que hay en argentina es mucho, y las elecciones son un factor más. Se espera una liberación del cepo al dólar, quita de subsidios, pero ahora el productor está en el medio del río", agregó el especialista.
Asimismo, un exportador de granos, que prefirió el anonimato, señaló a El Destape: "A título personal, creo que el productor tiene que vivir entre la nueva cosecha y el nuevo gobierno, y hay un año de diferencia en el medio. El que tenga espalda no va a retener ni más ni menos que lo que lo hizo en los últimos años. Se dice que se retiene desde los últimos dos años, y probablemente va a pasar lo mismo", dijo.
Lo cierto es que ambos expertos coinciden en la especulación sobre el tipo de cambio. "Insisto en que hay que separar entre chico y grande, porque el grande tiene ganadería u otros negocios y espera una devaluación, o cambios en los precios", señaló la fuente del sector exportador.
Asimismo, la variable política guiará los comportamientos de este año. "Al 2015 se le adiciona la perspectiva de las elecciones. Ahora van a vender soja en marzo, para asumir compromisos hasta junio. Pero a partir de julio-agosto el productor se va a sentar arriba de la soja con la expectativa o fantasía de medidas a favor del campo. Aunque nadie puede saber cuándo va a pasar", señaló Adreani.
En el mismo sentido se expresó la fuente exportadora: "La lógica económica indicaría vender, pero muchas veces los productores no tienen confianza. Eso es lo que ha pasado en los últimos dos años, y se van a comportar de la misma manera. Se va a vender cuando se vende: abril, mayo junio, y en los últimos meses va a haber una fuerte retención".
En cuanto a la estimación de pérdidas, Adreani hizo un análisis general del negocio, sin hacer foco en los comportamientos preelectorales. "Lo que hay que ver es cuánto va a perder por el atraso cambiario. El que retuvo soja y la perdió ya fue, pero hay algo más grave, que es la pérdida real en el negocio por la baja del precio internacional. Se puede estimar una pérdida de entre 1.500 a 2.000 millones de dólares en 2015 de capital operativo, por el actual esquema de retenciones, el atraso cambiario, en el caso de que vendiera toda la soja hoy. Si venden a este precio pierden plata", previó.
"El productor tiene el concepto de que como tiene soja, tiene dólares y no pierde, y se olvida de que tiene costos en pesos que suben, con tasas en pesos", advirtió el consultor agropecuario. En el caso de la oleaginosa disponible, el productor ya perdió 35 dólares por tonelada, mientras que desde diciembre, vio 30 dólares menos por retener y apostar a la devaluación.
"En los momentos que el precio subía, había más ventas, y cuando el precio bajaba había menos. Pero el comportamiento era curioso porque la curva descendente de los precios se ve desde agosto del año pasado", dijo el exportador.
Según la consultora Agripac, el productor vendió anticipado o forward 3,3 millones de toneladas de soja, mientras que en la campaña anterior había vendido 4,4 millones (en la cosecha 2012/13 las ventas llegaron a 7,5 millones de toneladas). Las ventas del productor del período marzo-abril-mayo fueron de 12,5 y 14,5 millones de toneladas en las últimas dos cosechas, respectivamente.
"Los candidatos tienen que anunciar desde el día uno (de la campaña oficial) qué van a hacer con el campo, y ahí se va a poder decidir qué se siembra, porque se siembra con un gobierno y se cosecha con otro. Pero para adelante tampoco se puede esperar una devaluación porque no se sabe cuándo lo van a hacer", aconsejó Adreani.
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