"Por lo tanto, vamos a hacer el esfuerzo necesario para que se pueda prestar el servicio", añadió el empresario, luego del encuentro realizado en Casa de Gobierno con el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, en el que, según dijo, "no se habló" de una posible suba en los subsidios.
Al negar supuestas advertencias del Gobierno, expresó: "No, fue muy cordial la reunión", y agregó: "La afectación (del Impuesto de Ganancias) no es la totalidad del personal, está afectado entre el 10 y el 15 por ciento del personal, nada más.
Según comentó, se trató que "el personal que esté a disposición, salga a trabajar, en tanto y en cuanto tenga las condiciones de seguridad, lo que se pidió a los ministros", en referencia a Fernández y al titular de Economía, Axel Kicillof, también presente en la reunión.
"Nosotros no podemos decir, previo al paro, que no va a haber gente", advirtió, para señalar que "cada uno del sector sindical sabe si puede o no trabajar, la libertad de trabajo la tienen, y por tanto tendrán que hacerse responsables de garantizar un servicio mínimo".
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Lischet indicó que "si van (a trabajar los empleados), están los coches a disposición, y vamos a intentar que el impacto sea el menor posible".
Por otra parte, dijo que fue "muy activa" la participación de Kicillof, "con sus números, que se analizaron en conjunto", aunque negó que se haya barajado elevar piso de subsidios al comsbutible.
Participaron representantes de la CETUA, ACTA, CETRA, FATAP, AAETA, CELADI, CEA, Transporte Vía Bariloche, y CUTUBA, entre otros. De parte del gobierno nacional participó además el subsecretario de Gestión de la Secretaría de Transporte, Gerardo Otero.
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