Con el 95,45 % de las mesas escrutadas, el candidato a gobernador de Santa Fe del Frente Progresista Cívico y Social Miguel Lifschitz aventajaba por una mínima diferencia a su rival del PRO, Miguel Del Sel.
Lifschitz reunía el 30,69% de los votos contra el 30,58% de De Sel, quien era seguido de cerca por el postulante del Frente Justicialista para la Victoria, Omar Perotti, con el 29,25 %.
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En declaraciones a la prensa, cuando el conteo de votos aún se estaba llevando a cabo, el ex intendente de Rafaela y candidato del FPV, Omar Perotti, sostuvo que estaban haciendo "una buena elección y damos pelea por el primer lugar en la provincia. Recibimos datos muy alentadores de Rosario y Santa Fe Capital".
Además, agregó que la presidenta Cristina Kirchner se comunicó con él y que ella estaba interesada por el desarrollo del comicio. Horas después, Perotti remarcó que pedirá que se abran las urnas para el escrutinio definitivo, ante lo exiguo de la diferencia.
Del lado del PRO, Mauricio Macri se negó a reconocer la victoria del Frente Progresista Cívico y Social en las elecciones generales de Santa Fe y sostuvo que el "triunfo" que se adjudicó el gobierno santafesino sobre el candidato del PRO, Miguel del Sel, "está lejos de ser realidad".
Tras indicar que el PRO "va a contar los votos", pidió "estar juntos a partir del jueves, viernes" por "ese Santa Fe que sea un motor" del "cambio" del país. "Estamos convencidos de haber ganado por una pequeñísima diferencia", dijo desde el búnker del PRO.
Sucede que minutos antes, el socialista Miguel Lifschitz salió a festejar un triunfo cuando aún los números del escrutinio lo daban abajo por poco. "Otra Vez el Frente Progresista ganando en Rosario y en Santa Fe. Era una elección difícil, peleada, voto a voto, pero aquí estamos ya con los números en la mano, esos números nos permiten afirmar que hemos triunfado", sostuvo ante la concurrencia en el búnker socialista.