Los analistas de la opinión pública volvieron a errar sus pronósticos tal como ocurrió con las elecciones generales del 5 de julio. Los especialistas no esperaban un resultado tan ajustado entre el candidato del PRO, Horacio Rodríguez Larreta (51,64%), y el postulante de ECO, Martín Lousteau (48,36%). La diferencia de 3,28% entre los contrincantes no sólo no se constató, ni siquiera se acercó a los pronósticos de los sondeos. Elisa Carrió, Margarita Stolbizer y los militantes de ECO lanzaron fuertes críticas a los encuestadores.
Las empresas que cometieron mayores fallas en sus estimaciones fueron Qualitative, OPSM y Politia. Todas proyectaron una diferencia superior a los 12 puntos entre ambos candidatos.
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A la cabeza, Qualitative consideró que la diferencia alcanzaba los 16,2 puntos, cosechando Larreta un 58,2% de los votos. La firma OPSM, de Enrique Zuleta Puzeiro, pronosticó que Larreta lograría 56,4% de los votos y Lousteau 43,6%, lo que da una distancia de 12,8 puntos. En el caso de Politia, una de las consultoras que mejor había calculado los resultados de las generales en la Ciudad, la brecha que había señalado era de 12,2 puntos.
En un segundo pelotón se encuentran Query, González y Valladares, Management & Fit y Poliarquía. Todas estimaron una distancia de entre 9 y 10 puntos entre los candidatos.
La consultora que mejor pronosticó los resultados para el balotaje porteño, aunque también estuvo bastante alejada en sus estimaciones, fue Opinaia. La empresa especializada en realizar sondeos online auguró que el candidato del PRO obtendría 53,6% de intención de voto, y el de ECO, 46,4%.
Furia contra los encuestadores
Una de las primeras en salir a fustigar a los encuestadores fue la aspirante a la presidencia por Cambiemos, Lilita Carrió, quien a través de su cuenta de Twitter sugirió "meter presos" a los encuestadores.
Por su parte, la precandidata presidencial Margarita Stolbizer también se refirió a los errores en las estimaciones y aseguró que "las encuestas pagas no pueden acallar las convicciones".
En la misma línea, los militantes de ECO cuestionaron anoche el trabajo de los encuestadores con cánticos desde el bunker de Matín Loustaeu. Exultantes por el buen desempeño de su candidato coreaban: "Qué boludos, qué boludos, las encuestas, se las meten en el culo".