Alberto Fernández enfoca la campaña de cara a octubre en distritos donde sabe que puede profundizar la diferencia con Mauricio Macri y que le permita obtener una victoria contundente. Anoche, en una cena en un histórico club porteño vinculado a la UCR, recibió el apoyo de radicales alfonsinistas.
Bajo el lema "Ahora Alberto", que recordaba al "Ahora Alfonsín" del 83 y con una bandera roja y blanca que tenía estampada la cara de Raúl Alfonsín, el candidato a Presidente del Frente de Todos dedicó su discurso a recordar anécdotas que tenían al ex mandatario radical y a Néstor Kirchner como protagonistas. Todo un gesto. Fernández apunta sus palabras a sectores de la sociedad aun no convencidos de la propuesta del Frente de Todos, y las referencias a las gestiones de los antes mencionados pueden ayudar a convencerlos y así ampliar la victoria en las generales. Las encuestas le dan alrededor del 52%, pero en el entorno de Fernández sueñan con superar el 54% que consiguió su compañera de fórmula en 2011.
Es por eso que evocó al "hombre inigualable, de una enorme generosidad y una enorme capacidad política", así lo definió. Por esta vez no se abocó a un discurso con propuestas, sino más bien a palabras emotivas, pero no por eso carente de divertidas historias. Tras mencionar que trabajó en el gobierno de Alfonsín como subdirector en el Ministerio de Economía, contó: "Cuando era jefe de Gabinete me invitaba a comer a su casa y siempre me invitaba a comer a su departamento, al mediodía, pejerrey frito con puré de papa y me decía que era de la laguna de Chascomús, nunca lo verificamos eso pero yo siempre lo comí convencido de que era así".
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Al referirse a cómo forjó su pensamiento, señaló: "Muchas veces me dicen 'por qué pensás como pensás' y esperan que les conteste que es porque leí un libro de Perón. Uno es resultado de muchas cosas, y yo soy también el resultado de Alfonsín”.
Tras ponderar los compromisos de Alfonsín con "la gente y sus ideas", mencionó su histórico discurso en la Sociedad Rural Argentina y señaló que “siempre se plantó diciéndoles a los argentinos, con franqueza, lo que correspondía”. Ahí, agregó: "El mejor recuerdo de Alfonsín es su conducta política y su compromiso con la democracia y el estado de derecho".
El Destape consultó a algunos de los presentes sobre cuál creen que será el rumbo que tomará Ricardo Alfonsín si el gobierno es derrotado. Convencidos de que no formará parte de la amplia unidad del Frente de Todos, sostienen que se acercará desde su rol como dirigente opositor que buscará aportar al "acuerdo social" que fue muy mencionado los discursos y al que Fernández apuesta para poder afrontar la pesada herencia que dejará Macri. Aun no se tomaron el café, pero descartan que lo harán próximamente.
Alberto estuvo rodeado por Leandro Santoro, referente de Los Irrompibles y organizador de la cena que se llevó a cabo en el histórico restaurante español Lalín, y por el secretario general de La Bancaria, Sergio Palazzo. El evento también sirvió para apoyar a la fórmula porteña Matías Lammens-Gisela Marziotta. El hit "Si vos querés, Larreta también" se escuchó en varias oportunidades y el candidato a Jefe de Gobierno fue uno de los más buscados para las fotos de los radicales que se acercaron hasta el lugar.
Para cerrar una noche llena de alusiones al primer presidente desde la vuelta a la democracia en 1983, Fernández utilizó una de sus más históricas frases: "El mejor homenaje que le podemos dar a Alfonsín, cuando nuestro mandato termine, es demostrarle a los argentinos que con la democracia se comía, se vivía y se educaba".