Por el escrache que vivió Mauricio Macri en Córdoba, cuando un hombre lo insultó al ingresar a un restaurante para cenar con el gobernador cordobés, Juan Schiaretti, se convocó a una "reunión operativa" para reforzar la seguridad del Jefe de Estado en plena campaña. Patricia Bullrich, ministra de Seguridad y Fernando de Andreis, secretario general de Presidencia, serán los protagonistas del encuentro para coordinar mejor los operativos.
La reunión será en Casa Rosada, donde debatirán Bullrich, que asigna personal de seguridad para el cuidado de Macri, y De Andreis, que maneja la Casa Militar y tiene la responsabilidad del diseño y la organización del operativo que debe mantener intacto al Presidente de la Nación, según informó Infobae.
Ya van varios episodios que lo encuentran a Macri vulnerable ante las quejas y los reclamos de los ciudadanos descontentos con sus políticas. Por eso, buscarán aceitar su seguridad en plena campaña, el momento en que más tiene que mostrarse el mandatario.
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Un funcionario le dijo a ese medio que en Córdoba "no hubo un adecuado espacio entre el momento que llegaba el Presidente y la prensa, que estaba en la puerta. Ahí tenía que haber un cordón policial". Pero además, remarcó el "desorden" que envolvió al episodio. Según se reveló, Macri estaba apurado por llegar antes de que comience el partido de Boca por la Copa Libertadores, que ganó.
Por otro lado, el funcionario le dijo a Infobae que "la camioneta de Schiaretti taponó totalmente la calle" y "a los pocos minutos, llegó la camioneta presidencial que estacionó detrás, y el Presidente no quiso esperar un minuto y se bajó". Se ve que estaba por empezar el partido. Eso hizo que la prensa estuviera en la puerta del restaurante y el mandatario tuviera que pasar entre los periodistas, momento aprovechado por un ciudadano para manifestar su descontento.
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