Ayer fue Miércoles de Ceniza, fecha en que los católicos inician los 40 días en los que la Iglesia llama a los fieles a la conversión y a prepararse para vivir los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo en la Semana Santa.
Para el 12 de mayo, fecha en que los cordobeses elegirán gobernador faltan 67 días, en los que Cambiemos tratará de resucitar de las cenizas donde se encuentra hoy, luego de que el radical Mario Negri y sus socios, el macrista Héctor “La Coneja” Baldassi y Luis Juez del Frente Cívico pegaran un portazo y se bajaron de la interna prevista para el 17 de marzo próximo donde el rival a vencer es el intendente cordobés Ramón Javier Mestre.
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“Rechazamos la interna por falta de transparencia. Más allá de la importancia de los consensos, no podemos desconocer que nuestra prioridad debe ser mantener vigente Cambiemos. Por eso, requerimos la cooperación política para que se encuentren los canales necesarios para que la coalición no se fracture en Córdoba; y para que se logre que Cambiemos pueda presentar candidatos de unidad en las elecciones del 12 de mayo”, le dijo Negri a los medios durante su recorrida por las ciudades de San Francisco y Morteros, en el límite con Santa Fe.
El 6 de marzo no es un día más para los radicales cordobeses. Hace 16 años, en 2003, moría Ramón Bautista Mestre, padre del actual intendente Ramón Javier Mestre, ex intendente de la Capital y ex gobernador; además de ex ministro de la Alianza de Fernando de la Rúa. Tampoco lo será, si se rompe Cambiemos Córdoba, porque la detonación impactará en la Casa Rosada.
En la reunión de apoderados de la Junta Electoral de Cambiemos que se realizó ayer en la Casa Radical, los representantes juecistas, el senador nacional Ernesto Martínez y Elina Zanoni presentaron la carta de Negri, Baldassi, Juez y la candidata a la viceintendencia capitalina, la académica feminista Alicia Migliore, donde denunciaron la falta de garantías para que la elección sea transparente: “Oportunamente, en el medio del avance de las conversaciones para lograr una lista única y fuerte, con el fin de competir contra el oficialismo provincial, intentamos organizar un proceso selectivo serio, dirigido a la totalidad de la ciudadanía independiente e incuestionable en sus resultados”, así inicia el texto.
Y cuestiona: “No contamos con padrones depurados, no hay autoridades comiciales y la logística y escrutinios provisorios inobjetables –a llevarse a cabo en los 408 circuitos electorales definidos- ha quedado demostrado inobjetablemente por los organismos y empresas con experiencia en ese oficio y a quienes por unanimidad esa Junta Electoral solicitara la viabilidad y presupuesto por esa tarea, la imposibilidad objetiva de llevarlo adelante”.
Negri y sus socios le apuntaron a Mestre:“La hora de la grandeza nunca llegó y elGobierno de Córdoba lo festeja, pues la lucha intestina de la oposición nucleada en Cambiemos, que siempre es útil promover, le resulta ampliamene beneficiosa”.
La Junta Electoral de Cambiemos Córdoba está integrada por los radicales mestristas Diego Frossasco y Facundo Cortez Olmedo –Negri no tiene representantes propios-; los juecistas Martínez y Zanoni; y los macristas Silvia Paleo y Oscar Agost Carreño. Todas las decisiones se aprueban por unanimidad o con cuatro votos de los apoderados de los tres partidos: UCR, PRO y Frente Cívico.
En la práctica, esto ocurrió hasta el cierre de las listas y el pedido de cotización del proceso electoral del 17 de marzo. Cuando el Correo Argentino y Ocasa le respondieron a la Junta Electoral de Cambiemos que no estaban en condiciones de realizar el escrutinio, estalló la coexistencia pacífica entre mestristas y negristas; tal lo adelantado por El Destape. El mestrismo propuso a la Facultad Regional Córdoba de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) y a la ONG Open Data para realizar las tareas de recuento de votos y transparencia del proceso electoral.
Federico Olivo, secretario de Extensión de la UTN, le dijo a la radio macrista Cadena 3 que “la UTN nunca tuvo la intención de participar de ese sistema eleccionario”; aunque aclaró que dicha universidad “puede participar con algún tipo de herramienta que es un software de veeduría que permite establecer información en tiempo real con la geolocalización del ingreso de la información. Por ejemplo, podríamos determinar la cantidad de urnas cómo están distribuidas en la provincia y en función de eso, saber cuánta gente está fiscalizando y saber si hay alguna inconsistencia en una acta o algún inconveniente”.
El juecismo, en nombre de Negri y Juez, presentó ante la Junta Electoral la impugnación para seguir adelante con el proceso electoral. El mestrismo, en tanto, defendió la transparencia y mostró que todo el proceso había sido convalidado por las tres fuerzas; mientras que el PRO jugó a una salida negociada en la Casa Rosada: que la Mesa Nacional de Cambiemos abra una nueva instancia de negociación para que la alianza “no se fracture” en Córdoba. Paleo y Agost Carreño responden al diputado de Bahía Blanca, Nicolás Massot, “monje negro” del macrismo mediterráneo, quien opera para que el presidente Mauricio Macri juegue con dos canastas en Córdoba: el gobernador Juan Schiaretti, viejo amigo de sus épocas de SOCMA; y Negri.
Precisamente, Carlos Briner, intendente de Bell Ville y compañero de fórmula de Ramón Javier Mestre apuntó esta mañana en Radio Mitre Córdoba: “El candidato del presidente Maurcio Macri en Córdoba es Juan Schiaretti”; y reclamó: “Que nos dejen votar, que no intervenga la Casa Rosada. Si interviene la Casa Rosada, claramente se beneficia Schiaretti”.
Con Negri denunciando la falta de garantías para transparentar la interna del 17 de marzo, Mestre ordenó a los suyos retrucar y demostrar que sí se podían hacer los comicios y que el negrismo, el PRO y el Frente Cívico sí están en condiciones de fiscalizar 1.499 mesas distribuidos en 450 lugares de votación, 150 de la Capital y 300 del interior.
La reunión de esta tarde de la Junta Electoral bloqueó por falta de mayoría cualquier decisión, y se elevarán dos despachos, uno del sector de Mestre y otro del de Negri. Como la Junta está inhabilitada para decidir, la pelota quedará en manos de la Justicia Electoral de Córdoba, más precisamente de la jueza Marta Vidal. La semana próxima, la jueza Vidal definirá si la interna se realiza porque están aseguradas las condiciones de transparencia, legalidad y legitimidad; o se cae por el reclamo de Negri & compañía.
Luis Juez no dudó y le apuntó a la jueza Vidal: “Yo ya había advertido que no podíamos meternos en una interna radical, que iba a ser una masacre. Pero esto que viene es peor: desde el 27 de diciembre la Junta Electoral de Cambiemos sabía que debía organizar una elección interna transparente; pero no se hizo. Ahora estamos en manos de la jueza marta Vidal, ¿por qué voy a confiar en la misma jueza que en septiembre de 2007, cuando Ricardo Jaime, (José) De la Sota y Schiaretti nos robaron la elección, se negó a abrir las urnas y contar voto a voto para desmantelar el mayor fraude que hubo en Córdoba desde 1930 a la fecha?”, le dijo a El Destape.
Y siguió: “En marzo de 2017 la jueza Marta Vidal tramitó ante la Caja de Jubilaciones de Córdoba su jubilación y se la concedieron. Sin embargo, sigue ejerciendo en la Justicia Electoral. Vidal convalida todos los actos que beneficien al oficialismo; y en este caso de Cambiemos, no olvidemos que quién la nombró como jueza es Alberto Zapiola, actual operador de Mestre. Ya sabemos cómo va a jugar”.
-¿Para Usted, la Jsticia Electoral de Córdoba va a fallar a favor de la interna del 17 de marzo?
-Todo es posible. Nosotros en estas condiciones no vamos a participar. No están dadas las condiciones de transparencia. En el caso de la jueza Vidal, pueda pasar que el pejotismo no la haga jugar ahora, porque la necesita para el 12 de mayo, donde los cordobeses vamos a ponerle fin a 20 años de gobiernos corruptos.
Con las negociaciones empantanadas y la decisión final en manos de la Justicia Electoral, todo hace suponer que Cambiemos Córdoba está quebrado y no habrá una salida consensuada. Toda ganancia para el gobernador Juan Schiaretti que busca su reelección, además de alcanzar el sueño de colocar un intendente peronista en la Capital.