En la jornada en la que el Frente de Todos cierra su campaña nacional en Rosario, Santa Fe, el precandidato presidencial Alberto Fernández tuvo una agenda cargada con diferentes sectores. A la mañana desayunó en la Asociación Empresaria con comerciantes y representantes de una decena de entidades ligadas a las pymes, entre las que se destacó la Federación de Industriales de Santa Fe (Fisfe), cuyo anterior presidente Guillermo Moretti es hoy vice de la Unión Industrial Argentina.
Allí, Fernández se mostró junto a los dirigentes nacionales Felipe Solá y Sergio Massa. El lugar estaba desbordado. Durante la reunión, que fue muy efervescente y contó con gran participación, los pequeños y medianos empresarios reflejaron una situación angustiante del sector, y prácticamente le rogaron que introduzca cambios en las políticas económicas de ganar las elecciones.
“Es muy deprimente la situación. No hay un solo sector que tenga un número positivo. Los que pueden sobrevivir desconocen lo que va a pasar mañana”, dijo Walter Andreozzi, integrante de la comisión directiva de Fisfe, una de las entidades que se ha mostrado más crítica con la gestión del macrismo. “Pedimos priorizar el mercado interno, y es lo que estamos escuchando del equipo económico de Fernández”, detalló el empresario.
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Cuando se retiraba, Fernández declaró a la prensa presente que “la Argentina ha padecido mucho estos cuatro años y la solución no es encontrar a un presidente que grita encloquecido. Hay que recuperar un horizonte”. Como dato de color, mientras los participantes del desayuno hacían cola para sacarse una selfie con Alberto como si se tratara de una estrella de rock, apareció el Tula, mítico hincha de Rosario Central y reconocido militante peronista (su bombo es todo un símbolo), que pidió su foto y le tiró “ondas positivas” para los comicios del domingo.
Luego, en el mismo edificio pero en otro piso, hubo una foto con un grupo de intendentes y presidentes comunales peronistas invitados por Marcos Cleri, actual diputado nacional y candidato a renovar su banca por el Frente de Todos en Santa Fe. Algunos dirigentes comentaron que se esperaba una mejor instantánea de la que finalmente se logró, pero la agenda era apretada y la convocatoria fue realizada con muy poco tiempo, todo un rasgo de la organización de la agenda de Fernández en la ciudad.
Tras la visita a la Asociación Empresaria, llegó el momento de visitar terrenos más hostiles. Al mediodía, en un encuentro que armó el gobernador electo de Santa Fe Omar Perotti, el precandidato almorzó en la Bolsa de Comercio con los popes de las finanzas y la agroexportación de la región. El presidente de la entidad, Alberto Padoán, participó hace días de un acto de Mauricio Macri en La Rural, pero se comenta en voz baja que no está del todo conforme con lo que viene haciendo Cambiemos.
El acercamiento es un gesto simbólico del exjefe de Gabinete, para mostrar que no se va a llevar “a las patadas” con estos sectores, como ocurrió durante el kirchnerismo. A la salida, en auto y casi sin dar declaraciones -“Fue una reunión muy linda”, fue lo poco que dijo-, la gente de a pie que pasaba caminando le agarraba las manos a través de la ventanilla, mientras el periodismo intentaba hacerle preguntas que Fernández prometió responder durante su discurso.
Desde las 15, en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario, Fernández firmaba un compromiso con los gobernadores que apoyan la fórmula (12 en ejercicio, 4 electos y 3 candidatos) sobre cinco puntos vinculados a la obra pública y políticas sociales en cada provincia en caso de que gane la elección. Esta fue otra idea de Perotti que a Alberto le gustó, concretando una gran sintonía entre ambos luego de un comienzo tibio. En el peronismo es tiempo de moderación, y el rafaelino encarna ese espíritu dialoguista y sin estridencias que tanto pregona AF.
Mientras tanto, ya suenan los bombos de los gremios y organizaciones sociales y políticas, y se comienza a congregar el público en las adyacencias del Monumento a la Bandera para participar del gran acto que tendrá como oradores a Alberto y Cristina Fernández de Kirchner. A juzgar por la cantidad de colectivos que llegaron desde diversos puntos de la provincia y el país, la convocatoria será colosal.
* Nicolás Maggi es corresponsal de El Destape en Santa Fe.
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