Desde Chacabuco, el candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, se mostró en campaña con Florencio Randazzo y terminó de confirmar su incorporación al espacio peronista opositor a Mauricio Macri. Sin especificar qué lugar ocupará en un futuro Gobierno, destacó la capacidad del exministro kirchnerista para comprender y administrar todo lo referido al Transporte, cartera que condujo por años.
"Contentos que nos esté acompañando activamente" Florencio, dijo Fernández y remarcó "su deseo y decisión de ayudar y colaborar" para mejorar el país. El exjefe de Gabinete de Néstor y Cristina Kirchner enfatizó que mantiene una relación de amistad con Randazzo y que "siempre tiene las puertas abiertas".
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Sin decir qué lugar ocupará el exministro en su Gobierno, en una entrevista con TN destacó la capacidad que tiene para temas como la economía, el transporte y la política.
En ese área, Randazzo fue consultado por el paro de pilotos previsto para este fin de semana: "Decir que es un paro K es una simplificación absurda" y explicó que el conflicto "es parte de la irresponsabilidad de este Gobierno que no se hace cargo de los verdaderos problemas que tienen, no solamente de Aerolíneas Argentinas".
Sobre este punto, Fernández aclaró su intromisión en el conflicto de pilotos: "Cuando yo planteo que es bueno que no tensemos más la cuerda y no vayamos al paro es porque el que paga los platos rotos es el que viaja y no son ellos los culpables del desastre que son ellos manejando Aerolíneas".
El candidato le pidió al titular de la empresa estatal, Mario Dell’Acqua, que "en vez de estar discutiendo" por los diarios, "se siente a discutir con los que trabajan y busque un acuerdo".
El conflicto es producto de una crisis económica para la cual Fernández adelantó un plan. Se trata del proyecto contra el hambre que, contó, nació de una charla en Madrid con Martín Caparrós y presentará el lunes.
Fernández argumentó que se dice que la Argentina es capaz de alimentar a 400 millones de personas pero no puede resolver el hambre de 15 millones que cayeron en la pobreza, por lo que pidió que la sociedad reflexione y haga un esfuerzo conjunto para afrontar una problemática cuya solución no debe ser exclusiva de un Gobierno.
Para ello, se creará un Observatorio destinado a controlar que los recursos alimenticios vayan a los sectores más vulnerables, sin intermediarios. Y remató: "Como sociedad debemos levantarnos, ponernos de pie y ponerle fin al hambre y la suba de la alimentación en la Argentina".