En 2013, Sergio Massa supo destacarse en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires obteniendo un triunfo arrasador. En las mismas, Massa había decidido alejarse del kirchnerismo y enfrentarlo con un discurso de "continuidad con cambios", logrando superar a su candidato, Martín Insaurralde, por más de diez puntos en tierras peronistas.
A partir de allí, su figura tuvo un ascenso impensado, y hasta comienzos de este año inclusive, las encuestas lo mostraban como "el" candidato a suceder a Cristina Kirchner el sillón de Rivadavia, superando en intención de voto a Daniel Scioli y Mauricio Macri, y afianzándose como la opción más firme de los grupos económicos para desplazar al kirchnerismo del que supo formar parte hasta hace tan sólo unos años.
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¿Cuántos votos perdió Massa en su bastión electoral en sólo dos años?
En octubre de 2013, el candidato de un reciente y prometedor Frente Renovador se quedó con las elecciones tras acumular un 43,92 por ciento de los votos, lo que representaba unos 3.776.898 votantes.
El último domingo, en cambio, el Intendente de Tigre conquistó en la Provincia al 18,25 por ciento del electorado, habiendo votado por él 1.496.700 personas.
Es decir que en tan sólo veinticuatro meses, el líder del Frente Renovador perdió cerca de dos millones y medio de electores, un 25 por ciento del padrón, lo que equivale a más de 3.000 votantes menos por semana.
Radiografía de la fuga de votos, partido por partido:
En 2013, Massa había vencido en 25 de los 29 partidos del Conurbano y en el 78 por ciento de los partidos de la Provincia. Sin embargo, dos años después y tras la fuga de 19 dirigentes entre los que se encontraban algunos clave como Darío Giustozzi, el Intendente de Tigre apenas pudo vencer en su tierra y en San Fernando dentro del Conurbano, perdiendo inclusive en Malvinas Argentinas con su caudillo electoral, Jesús Cariglino.
Además, fuera del Conurbano, apenas logró imponerse por un ajustado por 32 votos en General Lavalle y en San Andrés de Giles.
El "efecto legislativas", siempre presente:
Massa no es la primera, ni la última víctima de la abrupta fuga de votos en períodos muy cortos de tiempo. Para citar algunos casos resonantes de los últimos tiempos, se destacan las participaciones de algunos candidatos:
-Elisa Carrió: La diputada obtuvo, en los últimos 10 años, grandes resultados en las elecciones legislatvias, y muy bajos en las presidenciales en los años siguientes.
En 2009, por ejemplo, Carrió y su fuerza supo cosechar a nivel nacional casi seis millones de votos por el Acuerco Cívico y Social. Sin embargo, en las elecciones presidenciales de 2011, apenas pudo superar las PASO y culminó, en las elecciones definitivas, por debajo del voto en blanco inclusive, acumulando apenas un 1.84% de los votos.
No obstante, en 2013 y gracias al acuerdo con UNEN que pocos meses después se rompería, Carrió logró recuperarse en el escenario político, obteniendo un resonante segundo puesto en Capital Federal en fórmula con Pino Solanas. Este domingo, quedó afuera de la carrera presidencial luego de ser la precandidata menos votada en el Frente Cambiemos, sumando apenas más de 500 mil votos.
-Francisco De Narvaez: El ex precandidato a gobernador bonaerense por el Frente Renovador, cuenta con uno de los casos más emblemáticos de pérdida de votos. En 2009, junto a Mauricio Macri y tras cosechar una popularidad asombrosa en apenas unos meses gracias a sus participaciones en el programa de Marcelo Tinelli, el ex dueño Casa Tía, superó, en la Provincia de Buenos Aires, ni más ni menos que al ex presidente Néstor Kirchner, Daniel Scioli y el propio Sergio Massa.
Sin embargo, dos años después, De Narvaez fue por todo y se presentó en las elecciones generales en alianza con Ricardo Alfonsín, buscando ser el gobernador de la Provincia: allí, una vez más, el territorio le fue esquivo y apenas logró cosechar un 16 por ciento de los votos, perdiendo casi 20 puntos porcentuales en sólo 24 meses.