Elecciones 2015: las metas sciolistas de cara a octubre

15 de agosto, 2015 | 17.45

El fallido viaje de Daniel Scioli a Italia en medio de la situación de emergencia en la provincia de Buenos Aires no fue el mejor inicio de campaña a la presidencia, pero en el entorno del gobernador entienden que esto recién empieza y que en unos días ya se estará hablando de otra cosa.

Luego de un análisis en detalle de los resultados del domingo pasado, llegaron a la conclusión de que el objetivo de cara al 25 de octubre será mejorar en cinco puntos lo obtenido en tres distritos: provincia de Buenos Aires, Capital Federal y Córdoba. Juntos representan el 53 % del padrón nacional y sostienen que la cosecha de Scioli estuvo allí por debajo de lo que imaginaban y de lo que el candidato puede conseguir.

Los porcentajes de las PASO en el norte del país estuvieron muy bien –en muchas provincias superó el 50 por ciento y en alguna el 60-, el sur también les trajo buenas noticias, así que el problema quedó localizado en la franja centro. "No quiere decir que Scioli dejará de viajar al interior, pero el esfuerzo va a estar puesto en revertir la situación en las provincias de la región central", explicaba un dirigente con voz de mando en el búnker naranja.

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

En Córdoba, por ejemplo, el candidato presidencial sacó el menor porcentaje del país, incluso menos de lo que obtuvo en la elección a gobernador el candidato K Eduardo Accastello, que ya de por sí no era mucho. En voz baja, hay sciolistas que acusan a Accastello de hacerse el distraído con la campaña nacional. Con todo, Scioli espera sacar provecho de su buena relación personal con José Manuel de la Sota y Juan Schiaretti.

De los más de 600 mil votos peronistas que le permitieron ganar a De la Sota las PASO en Córdoba, imagina que le corresponderá una buena tajada, más allá de la intención del ex ahora ex candidato presidencial de mantenerse dentro de la alianza con Sergio Massa. Aseguran que Schiaretti no quiere encabezar otra gestión enfrentado con la Casa Rosada y que tanto él como De la Sota podrían retornar en un futuro no muy lejano al peronismo bajo el ala sciolista.

En cambio, en la provincia de Buenos Aires Scioli ganó, pero no con el porcentaje que podría esperarse. Creen que las inundaciones y la denuncia mediática contra Aníbal Fernández afectó, pero también hablan de algunas deficientes gestiones municipales que será necesario apuntalar en los dos meses largos que restan de campaña.

Concretamente, la preocupación está centrada en La Plata, Mar del Plata y Bahía Blanca. Tres grandes ciudades bonaerenses que gestiona el Frente para la Victoria en las que ganó Cambiemos, haciendo una diferencia de 70 mil votos. En esos tres puntos estará centrado el esfuerzo en busca de una diferencia mayor. Superada la dura interna que enfrentó a Fernández con Julián Domínguez apuntarán a que todos los intendentes del peronismo tiren para el mismo lado, algo que aseguran no sucedió en la campaña para las primarias.

En la ciudad de Buenos Aires resultó llamativo que Scioli sacara apenas un punto y medio más que Mariano Recalde como candidato a jefe de gobierno. Los sciolistas aseguran que la semana anterior tenían una encuesta que le daba al candidato presidencial y al candidato a diputado Axel Kicillof un 5 por ciento más que lo que sacaron en las urnas. Creen que la baja entonces fue por la denuncia mediática contra Aníbal Fernández, en un distrito muy sensible a ese tipo de climas. De acá hasta 3el 25 de octubre creen posible revertir la situación.

Sumar cinco puntos más en Córdoba, Buenos Aires y Capital Federal le significaría a Scioli incrementar en más de 600 mil votos lo obtenido en las primarias, lo que le permitiría acercarse al 42 por ciento a nivel nacional, con buenas posibilidades de dejar fuera de batalla a Mauricio Macri en la primera vuelta. El objetivo está trazado y hacia allí se dirigirán los esfuerzos.