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El secretario de Derechos Humanos bonaerense, Guido Carlotto, destacó que desde su cargo mantuvo una relación inmejorable con Casal y también con el ministro de Seguridad, Alejandro Granados, otro dirigente con un discurso más afín a la mano dura y cuestionado, por ejemplo, por el periodista Horacio Verbitsky en sus columnas del diario Página 12.
Por FM Uno, el hijo de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo destacó: "Con Casal coordiné políticas, jamás me negó el acceso a un archivo. Con Granados he coordinado todas las políticas de incorporación de los policías para analizar perfiles y nunca tuve problemas. Se los acusa de duros porque tienen terminología dura (sic) pero no son duros cuando hablas con ellos. Con los que mejor me llevé fue con Casal y Granados".
Inclusive, el funcionario defendió la labor del posible ministro de Justicia de Scioli en la Nación en torno a la desaparición del adolescente Luciano Arruga. "Se terminó descubriendo que estaba como NN enterrado por una negligencia de un hospital en Capital, no fue Casal el que lo ocultó", respondió.
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En relación al futuro de los juicios por delitos de lesa humanidad durante los próximos 4 años, Carlotto destacó el avance de los mismos y que "no quedan muchos juicios por desarrollar, quizás salga alguno de una megacausa, como Campo de Mayo".
Por último, negó que el actual gobernador bonaerense haya hablado con él para que ocupe en el cargo de ministro de Derechos Humanos pero aclaró: "Claro que me gustaría ocupar esa cartera, pero lo más importante es la política. Si me toca a mí o no...bueno".
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