Desde el Gobierno minimizaron la posibilidad de que el PRO y el Frente Renovador confluyan en una alianza para derrotar al oficialismo en octubre. Esta mañana, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, señaló que los líderes de ese espacio al sentenciar que "no tienen nada que ver uno con el otro".
"No es un tema que a mí me preocupe, qué hace la oposición, pero no creo que suceda nada de eso. No tienen nada que ver el uno con el otro", evaluó el ministro, consultado sobre esta posibilidad, según la cual Massa accedería a un acuerdo con Macri, buscando acrecentar las chances opositoras de cara a las PASO del 9 de agosto y las generales del 25 de octubre.
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En su habitual contacto con periodistas en la Casa de Gobierno, además, advirtió que ambos dirigentes "no tienen mucho para generar alianzas, porque es el 10 de junio, y el 20 se presentan las listas, así que tienen pocos días para estas elucubraciones".
Desde que Sergio Massa se lanzó a un tobogán y su intención de voto cae, aumentaron las elucubraciones respecto de un acercamiento con Macri, hoy reacio a incorporar a su ex aliado en 2013. Por el momento, la estrategia del PRO en la provincia ha sido acercar posiciones con parte de la estructura massista para que se pase al PRO, aprovechando la enorme sangría de dirigentes. Distintas voces ligadas al Tigrense salieron a reflotar la idea de una gran PASO opositora, como Francisco De Narváez.
Inclusive, el electo intendente de la ciudad de Salta, el massista Gustavo Sáenz, remarcó que espera que su triunfo sea "el preludio a un acuerdo" entre ambos referentes de la oposición.
"Hay que dejar de lado las individualidades y en definitiva pensar en los argentinos, porque si no va a ser muy difícil ganarle al oficialismo. El aparato nacional, provincial y municipal estuvo muy presente así que peleamos contra todos", sostuvo Sáenz en declaraciones a Nacional Rock y Continental.
Del lado de la Alianza UCR-PRO, Elisa Carrió siempre ha puesto a Massa como un límite para una eventual alianza, por lo que un eventual acuerdo entre Macri y Massa sería un golpe para la chaqueña.