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Es que, de los 130 diputados que deben renovar su lugar, el 57% pertenecen al kirchnerismo, sin contar a los eventuales aliados de los que se ha valido el FpV en las contiendas legislativas. En total, 75 escaños que hoy tienen a un diputado K deberán revalidarse en octubre.
En cuanto a la Cámara alta, la situación es poco más auspiciosa, ya que se renuevan las bancas de la elección 2009, en donde al oficialismo no le fue bien y perdió en muchos distritos. Solo 4 de los 24 escaños pertenecen al FpV.
Diputados: un bastión K
Gracias a la ayuda de sus eventuales aliados, como el Movimiento Popular Neuquino y el Frente Cívico de Santiago del Estero, el Frente para la Victoria ha logrado quórum propio en las votaciones de la cámara de Diputados. Sin embargo, y al tener que revalidar los lugares que obtuvo en la aplastante victoria del 2011, cuando Cristina Kirchner promedió un 54% en todo el país y lograron 75 bancas, la posibilidad de mantener esos números se complica.
Como era de esperarse, la provincia de Buenos Aires es en donde el FpV tiene la parada más importante : 21 de los 35 escaños que se definirán en estas elecciones hoy son kirchneristas, y también habría que sumar al "moreauista" Eduardo Santín, que se alejó de la UCR para cerrar filas con el oficialismo al igual que Ramona Pucheta, ex aliada de Raúl Castells. El Frente Renovador tiene 5 de estas bancas, Cambiemos (PRO+UCR+CC) 2 , Progresistas (GEN+PS+Libres del Sur) 4 y Frente Popular 1.
Capital Federal, distrito adverso al FpV si los hay, también tiene mayoría de diputados K que a los que se le vencen sus mandatos en estas elecciones 2015. Renuevan 12, de las cuales 5 hoy están en el FpV, 5 en Cambiemos, 1 en el Frente Popular y 1 en Progresistas.
En Santa Fe, de los 10 diputados a repartir, 4 son del FpV, 4 de Progresistas, 1 del Frente Renovador y 1 del Frente Popular.
Además, el oficialismo es el partido hegémonico en varias provincias. En Río Negro, San Juan, Formosa y Chubut se adueñó de las 3 bancas que cada provincia elige este comicio, como así también de las 2 bancas respectivas de Catamarca y Santa Cruz. En Santiago del Estero, con 4 bancas, las mismas fueron monopolizadas por el Frente Cívico, habitual aliado de la Casa Rosada en la Cámara Baja.
La oposición, según los frente electorales compuestos en la actualidad, pone en juego la siguiente cantidad de escaños: Cambiemos 21, Progresistas 9, Frente Renovador 6, Frente Popular 3 y Compromiso Federal 3.
La batalla por el Senado
Aquí la situación es un poco más sencilla para el oficialismo nacional y más complicada para la oposición, ya que se renuevan las 24 bancas que entraron en vigencia en 2009, con la derrota del FpV. Las provincias que elegirán senadores (2 por la mayoría y 1 por la primera minoría, sin importar porcentajes) son: Santa Fe, Córdoba, Mendoza, Tucumán, Corrientes, Chubut, Catamarca y La Pampa.
El FpV intenta renovar sus 2 lugares por la mayoría en Tucumán y las bancas por la minoría en Mendoza y Catamarca. Los partidos que están en Cambiemos se juegan 13 lugares en la Cámara Alta, Progresistas 1, Frente Renovador 1 y peronistas no kirchneristas 4. A estos hay que sumar al Partido Liberal correntino con una banca.
Cambiemos es mayoría en Santa Fe, Mendoza y Catamarca. En Córdoba tiene las 3 bancas, gracias a las 2 del Frente Cívico (juecismo) y 1 de la UCR, Asimismo, es minoría en Corrientes, Tucumán, Chubut y La Pampa. El Socialismo, dentro del frente Progresistas, buscará renovar el espacio que hoy tiene Rubén Giustiniani por Santa Fe. Esa provincia tendrá una pelea titánica por las tres bancas a senador, que se repartirán entre Cambiemos (Reutemann), FpV (Omar Perotti) y Progresistas (Hermes Binner).