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"Cada argentino debe producir, por lo menos, lo que consume" es, a esta altura, una muletilla de Macri, que este lunes cargó contra los trabajadores y les pidió "no poner palos en la rueda", "no forzar ausentismos ni juicios". La consigna formulada por Juan Domingo Perón fue explicada por el caudillo justicialista en el primer libro que escribió desde el exilio luego de la autodenominada "Revolución Libertadora": "La fuerza es el derecho de las bestias", de 1958.
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Allí, el ex presidente entre 1946 y 1955 (aun faltaban 15 años para su vuelta al poder) escribió, en el capítulo 3, titulado "La reacción parasitaria": "En la República Argentina se ha producido el choque entre la clase parasitaria y la productora. La oligarquía, el clero, los sectores parasitarios de los profesionales y de las fuerzas armadas, se han lanzado, en reacción violenta contra la clase productora, utilizando las armas, los soldados del pueblo".
"La oligarquía, el clero, los sectores parasitarios de los profesionales y de las fuerzas armadas, se han lanzado en reacción violenta contra la clase productora"
En otro párrafo, agrega: "El régimen justicialista había lanzado una "consigna negra" para los parásitos: "cada argentino debe producir, por lo menos, lo que consume". La organización del Pueblo, el trabajo organizado irá cerrando el cerco alrededor de los que consumen sin producir. Ese fue uno de los motivos de la reacción. La imposición de una real y efectiva libertad de cultos, que nunca existió en la Argentina, fue otra de las causas. La impotencia de los políticos para deshacer al Pueblo organizado y someterlo a sus negros designios interesados, completa el cuadro de esta reacción parasitario".
Es decir, Perón identifica claramente a los trabajadores como el sector productivo, en tanto que gran parte del empresariado nacional (en especial el vinculado al campo) forma parte de la clase parasitaria, que gana dinero a expensas del esfuerzo físico y mental de otros. A diferencia de la actualidad, en donde campo, mineras y grandes sectores empresarios son puestos como el motor del país y los trabajadores, como los que deben corregir sus "vicios" si quieren que el país salga adelante. Una gran diferencia.