Steve Hansen, entrenador de la selección de rugby de Nueva Zelanda sostuvo ayer, tras derrotar en semifinales del Mundial de rugby a Sudáfrica (20-18), que no tiene preferencia como rival para la final del próximo sábado.
Argentina y Australia se enfrentan en la segunda semifinal, hoy en Twickenham a las 13, y el técnico neozelandés espera que se machaquen entre ellos para que lleguen muy cansados al partido decisivo.
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"Espero que en ese partido entre Argentina y Australia se machaquen entre ellos y esperaremos al ganador en un partido que será especial", señaló.
"No he tenido tiempo de pensar en cuál quiero. Sólo quiero que se cansen entre ellos y centrarnos en lo que queremos hacer nosotros", dijo.
"Estaremos pensando en qué puede pasar en ese partido, sin pensar si tendremos que fijarnos en que el rival enfrente tenga una camiseta amarilla o albiceleste", añadió.
"Ambos equipos marcaron muchos puntos con los pies y veremos si podemos solucionar eso", concluyó.
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