Los bonistas descuentan la postergación del pago de la deuda

La disparada del riesgo país y el derrumbe en el precio de acciones argentinas en Wall Street indican que los inversores asumen como un hecho el aplazamiento en el pago de la deuda.

23 de marzo, 2020 | 19.32

La frágil situación financiera que heredó el Gobierno nacional se agravará aún más por el impacto económico de la pandemia. El propio presidente Alberto Fernández admitió que Argentina no le podrá pagar al Fondo Monetario Internacional "un peso" en los próximos cinco años. El riesgo país se disparó hasta los 4.500 puntos básicos y las acciones en Wall Street se hundieron en el feriado puente local.

“Le dije al FMI que en los próximos cinco años no les podemos pagar un peso”, reveló el jefe de Estado el domingo en radio Rivadavia. "Antes de la pandemia, yo le había dicho al FMI que no podíamos pagar a costa de nuestro pueblo. Ahora tengo mil razones más", argumentó.

Las principales economías del mundo fueron las más golpeadas por el Covid-19, países de los que depende Argentina para el comercio exterior. Esto dificultará la exportación y la consiguiente generación de divisas, muy necesarias para el pago de la deuda externa ante el debilitado Banco Central.

El golpe de la pandemia también será fronteras adentro, por el parate en el que entró el país luego del aislamiento preventivo obligatorio decretado desde el viernes pasado que se prolongará, al menos, hasta el 31 de marzo. "Vamos a tener que hacer un esfuerzo mayúsculo para levantar la economía", admitió Fernández.

El ministro de Economía, Martín Guzmán, abrió un proceso de reestructuración del pasivo público externo a pocos días de asumir sus funciones, ante la inviabilidad de la deuda que dejó Mauricio Macri. En el cronograma oficial, el Gobierno debía publicar su propuesta a los bonistas hace más de una semana, pero el arribo del coronavirus a la Argentina postergó el anuncio. Desde el Palacio de Hacienda argumentan que las fechas de la agenda no son rígidas, sino que tienen un papel estimativo.

Esta conjunción de sucesos impulsó al riesgo país, calculado por el banco JP Morgan, a subir 406 puntos básicos hasta los 4.470. Los inversores descuentan que se postergue el abono de algunas de las obligaciones en dólares del Gobierno por los anuncios.

A la par, todas las acciones de las compañías locales cayeron en la bolsa de Nueva York, con unas pocas excepciones. Los papeles de Despegar.com se desplomaron 26,9%, las de Cresud 13,1%, Ternium 9,4%, IRSA Inversiones y Representaciones 8%, Edenor 6,8%, Banco Macro 6,5%. En tanto, Telecom mejoró 2,9%, Tenaris 1,6% e IRSA Propiedades Comerciales 1,3%.