Mientras la UCR y la Coalición Cívica respaldaron el entendimiento al que llegó Argentina con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el bloque del Frente PRO se mantiene la incógnita sobre cómo votarán cuando el acuerdo definitivo llegue al recinto. Tras la reunión de la bancada para discutir este tema, el presidente del bloque, Cristian Ritondo, aseguró: “Nadie puede decir cómo va a votar un texto que no conoce”.
Durante las deliberaciones, decidieron por unanimidad en que es imprescindible conocer los detalles del acuerdo para poder consensuar una postura en el bloque y en Juntos por el Cambio. Asimismo, destacaron la importancia de no caer en default y de avanzar hacia un acuerdo razonable que le permita a la Argentina mantener una relación madura con el mundo.
“Nadie puede decir cómo va a votar un texto que no conoce. El acuerdo con el FMI es con 184 países que lo integran, es decir, se trata de un diálogo internacional que no puede estar sometido a caprichos de la política interna ni de cuestiones ideológicas superadas”, subrayó Ritondo. Y agregó: “Queremos que sea un país normal y no un Estado rehén del relato populista que atrasa y nos hunde en la pobreza y el aislamiento”.
Los expositores fueron el diputado Luciano Laspina y el exministro de Economía de la Nación durante la gestión de Macri, Hernán Lacunza. "Todavía no conocemos la letra del acuerdo. Lo que sabemos es que no hay cambios de fondo en las principales políticas del kirchnerismo pero al menos le pone un freno al descontrol monetario y fiscal que viene haciendo el gobierno”, afirmó Laspina. Entretanto, Lacunza manifestó que, del acuerdo, solo se conoce una hoja de ruta. “Por ahora, se evitó el default lo que es positivo, pero no alcanza. Por eso el Gobierno debe presentar un plan lógico para que lo acompañemos”, marcó.
Previamente se llevó a cabo una reunión respecto al proyecto sobre la reforma del Consejo de la Magistratura que impulsa Juntos por el cambio y allí hubo coincidencia unánime para que el instituto creado por la reforma constitucional de 1994 sea presidido por el titular de la Corte Suprema de Justicia. La misma postura que adoptó la mesa nacional de la alianza opositora este lunes.
En ese sentido, el legislador Pablo Tonelli aclaró que “la solución más republicana es que el Congreso dicte una nueva ley orgánica" y apuntó que "los principales puntos que debe contener la ley incluyen que la Corte, a través de uno de sus miembros, integre el Consejo y lo presida, mejorar el procedimiento de los concursos y la gestión presupuestaria, e incrementar las auditorías y controles de gestión del Poder Judicial”.
A su turno, el exministro de Justicia bonaerense Gustavo Ferrari sostuvo que “la conformación del Consejo de la Magistratura, por la exigencia constitucional, es el garante de la independencia judicial" y que "según como se elijan a los jueces es cómo vamos a tener el modelo de Justicia que el país merece y con una administración lógica hacia las necesidades de los ciudadanos”.
Entretanto, Diego Marías, integrante del Consejo de la Magistratura, explicó que este órgano multisectorial “es importante porque es lo que la Constitución prevé para designar y/o remover a los jueces de todo el país y otra función es administrar el Poder Judicial”.
Por eso, en Juntos por el Cambio ven con buenos ojos "acatar" el fallo de la Corte Suprema que declaró inconstitucional la ley de reforma de 2006 y que ordenó volver a un Consejo de 20 miembros con el presidente de la Corte a la cabeza.