El peor récord: Cambiemos registra la peor actividad legislativa en 12 años

10 de diciembre, 2018 | 09.45

Días atrás, el pasado 6 de diciembre cuando Emilio Monzó asumió su tercer mandato como Presidente de la Cámara Baja admitió la necesidad de aumentar las sesiones, ya que el trabajo dentro de los dos recintos este año, que no fue electoral, fue escaso.

A principio de año Cambiemos había marcado como objetivo revertir el récord negativo del año 2017 donde no hubo ninguna sesión de tablas. El marcador esta vez no quedó en cero, pero estuvo lejos de las expectativas: se realizaron apenas 2 encuentros de este tipo, uno de los cuales terminó en escándalo.

Las sesiones de tablas deberían ser la regla, pero se transformaron en excepción en los últimos años. Al convocar a este tipo de sesiones, el oficialismo está obligado a confeccionar el temario en conjunto con la oposición. En cambio, si llama a sesión especial, puede trazar la agenda a su antojo.

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En 2016, primer año de gestión de Cambiemos, solo 6 de las 24 sesiones fueron de tablas. Las restantes fueron 12 especiales, 2 informativas del jefe de Gabinete, 3 del período extraordinario en diciembre y una preparatoria para renovar autoridades -sin contar la Asamblea Legislativa del 1ro. de marzo ni las sesiones en minoría-.

Un año después, el número de sesiones de tablas bajó a cero: en 2017 hubo 10 especiales, 3 informativas y una extraordinaria en febrero. Si bien se sancionaron leyes que requirieron altos niveles de consenso -la más recordada es la reforma previsional-, el oficialismo se arrogó la facultad de fijar siempre el temario en el recinto.

En el periodo de este año, 2018, ya es un hecho que Cambiemos cierra el año con apenas 2 sesiones de tablas, frente a 5 especiales. Hubo además 4 informativas. El Senado tuvo 12 sesiones, el valor más bajo desde, al menos, 2003. En 2015 también hubo esta cantidad de sesiones.

En un año en el que no hubo movimiento electoral, Cambiemos demostró el bajo nivel de dialogo legislativo con las otras fuerzas.