El ministro de Trabajo reconoció que los salarios quedarán por debajo de la inflación

En una entrevista para el diario español El País, el ministro dejó entrever que los salarios quedarán por detrás de la inflación luego de las discusiones paritarias, donde el Gobierno pretende una mejor salarial de entre el 20 y el 25 por ciento. Al ser consultado sobre si los trabajadores van a perder capacidad adquisitiva como resultado de esas negociaciones, respondió: "No tiene por qué. Los vamos a ayudar con bajadas de impuestos y eso va a compensar la diferencia. Todos vamos a hacer un esfuerzo".

Además, desesetimó que existan al menos 10.000 despidos en la administración pública al indicar "no tenemos esos datos" y que "esos números son muy aventurados de momento".

"Cada ministerio está haciendo sus evaluaciones. Por supuesto que la planta política del Gobierno que se fue se le ha pedido que dé un paso al costado. Algunos lo han hecho siguiendo la lógica de lo que había que hacer y otros se resisten a asumir esa responsabilidad", remarcó.

Además, subrayó: "Hemos detectado que en los últimos tiempos se ha tomado el Estado como un botín, se puso gente en distintos cargos sin una función específica, sin una asignación concreta, a veces con recursos ilimitados, sin ceñirse a los Presupuestos. Estamos revisando todo. Es un acto de justicia".

"El salario no es el principal problema argentino. Es lograr que Argentina crezca, y si hay más productividad habrá más salario. Vamos a cuidar las inversiones que generen puestos de trabajo para el objetivo de fondo que es pobreza cero", puntualizó.