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Luego de la polémica que se desató esta semana por el acuerdo entre el organismo previsional y la jefatura de Gabinete, a partir de la cual Marcos Peña tendrá acceso a los datos de 32 millones de personas con el fin de "comunicar mejor", el Gobierno estrenará este Gran Hermano para enviarles comunicaciones directas a quienes sospechen puedan tener bienes no declarados. Para ello, cruzarán datos con la AFIP.
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Según consigna el matutino Ámbito Financiero, la estrategia sigue la línea de la empleada cuando eran solo gobierno de la Ciudad de Buenos Aires: primero, mensajes en medios masivos anunciando la existencia de la posibilidad de "exteriorizar capitales" y adherirse a la moratoria fiscal y previsional; segundo, irán con mensajes directos, vía correo electrónico y redes sociales, para presionar a quienes vean que poseen inconsistencias en sus declaraciones juradas entre su nivel de gastos, ingresos y bienes declarados. Esta última estrategia, creen en el PRO, ha sido más redituable que utilizar grandes campañas de comunicación.