El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, admitió que el Gobierno seguía "segundo a segundo" las consecuencias de la erupción del volcán chileno Calbuco, como la lluvia de cenizas que cubría esta mañana las localidades patagónicas de San Carlos de Bariloche, San Martín de los Andes y Villa La Angostura, hecho que recordó lo acontecido hace tres años con el volcán Copahue.
Anibal Fernández reconoció que se trataba de un fenómeno que demandaba "un trabajo que hay que estarle muy encima y muy ocupado de lo que está sucediendo, para responder con reacciones inmediatas y no esperar pasos innecesarios". "Nosotros, desde el primer momento que tomamos conocimiento, instruimos a la oficina del Plan (Nacional) de Manejo del Fuego para que se constituyera en lo que es el centro de operaciones de emergencia. Lo venimos siguiendo segundo a segundo", aseguró Fernández en diálogo con la prensa en la Casa Rosada.
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El Calbuco es un volcán que hizo erupción luego de una inactividad de 43 años. Está ubicado en la región de Puerto Montt, Chile, pero sus cenizas llegaron a Bariloche, San Martín de los Andes y Villa La Angostura y se especula que pueda llegar a Buenos Aires. Por el hecho fueron evacuadas unas 5.000 personas en el país trasandino.