Una de las medidas anunciadas por el Gobierno fue el relanzamiento del plan Procrear. Sin embargo, Cambiemos desconoce la dramática situación que atraviesan los ya inscriptos, que no recibieron ninguna solución.
Entre la batería de medidas, el Gobierno lanzó la convocatoria para un nuevo llamado del Plan Procrear, para que "10.000 nuevas familias puedan acceder a su vivienda y se sumen a las 30.000 que ya escrituraron".
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Sin embargo, el colectivo Procear Jóven Resiste presentó hace algunos días un documento firmado por distintos legisladores para reclamar ante la Comisión de Vivienda y Ordenamiento Urbano al secretario de Vivienda, Iván Kerr. El motivo es el pésimo estado de situación de aquellos que accedieron al crédito.
Los 16.000 adjudicados en el programa, de los 40.000 que había en 2017, se encuentran asfixiados por el proceso inflacionario y la devaluación. La disparada del dólar licuó los ahorros mensuales por estar pesificados.
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La propuesta admitía de dos a cuatro ingresos mínimos, tanto formales e informales. Ahora, los bancos involucrados (Nación, Galicia, Hipotecario, Ciudad y Provincia) no admiten ingresos en negro, dejando de lado a miles de personas.
Además, los montos ahorrados se miden en Unidades de Valor Adquisitivo (UVA), una unidad de medida creada por el Banco Central para fomentar el crédito hipotecario. La tasa contratada queda fija a lo largo de la vida del préstamo y la deuda queda establecida en UVAs, como así también las cuotas.
A pesar de que las subas de precios no incrementan los intereses que deben pagarse, sí aumenta la deuda total con el banco. Si vuelve a dispararse la inflación, también lo hará el pasivo final.
Por eso, ante la brutal suba de precios y la suba del dólar, las familias incluidas en el programa piden respuestas concretas a la crisis. De momento, al Gobierno parece no importarle.
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