El Banco Central (BCRA) enfrentó un nuevo “supermartes” y concretó la tercera fase del programa de desarme de Lebac mediante una serie de medidas que apuntaron a evitar el pasaje masivo al dólar. La autoridad monetaria respondió a un megavencimiento de $ 231.000 millones.
El presidente del Central, Guido Sandleris, continuó la estrategia de desarme emprendida por Luis Caputo y la entidad ofreció un monto que rondó entre los $ 100.000 y $ 150.000 millones. El stock actual se estimó en casi $ 341.000 millones, el cual se espera, desde el Ejecutivo, que sea eliminado para el mes de diciembre.
Por ésto, la autoridad monetaria licitó Letras del Tesoro Capitalizables en Pesos a un plazo de 193 días (30 de abril de 2019) capitalizable mensualmente a la tasa nominal mensual de 4%, y también a un plazo de 377 días (31 de octubre de 2019), capitalizables mensualmente a la tasa nominal mensual de 3,35%.
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La estrategia fue evitar que los - al menos - $ 80 mil millones que quedarán liberados al mercado no se vayan al dólar, que en las últimas semanas mostró una tendencia a la baja, sino que apuesten a otra forma de inversión y no haya presión sobre el mercado cambiario.
Además, el BCRA colocó $ 132.119 en Letras de Liquidez “Leliq” a siete días, con un rendimiento promedio del 72,19% anual y una tasa máxima promedio de corte del 73,92%. El vencimiento era $ 143.104 millones.
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