El ministerio de Seguridad denunció ante la Justicia a los tres custodios que tenían a su cargo la protección del fiscal especial Alberto Nismanel día de su muerte, con el objetivo de que se esclarezca lo que sucedió en el departamento de Le Parc durante las 12 horas previas a la llegada del secretario de Seguridad, Sergio Berni.
La acusación quedó radicada en el expediente que investiga la muerte del fiscal que lleva adelante la fiscal Viviana Fein. La presentación ante la fiscalía la efectuó el subsecretario de Articulación con los Poderes Judiciales y los Ministerios Públicos, Rodrigo Luchinsky.
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El sargento Rubén Benítez de la Policía Federal, junto con los policías Armando Niz y Luis Miño, que integraban la custodia de Nisman, están en "disponibilidad preventiva" por decisión del jefe de la Policía Federal Román Di Santo hasta que se aclare su participación en el marco de la muerte del fiscal.
Ante la fiscal Fein, Niz y Miño declararon con contradicciones de horarios y por eso se les abrió un sumario administrativo.
Benítez le dijo a la fiscal que Nisman le había pedido consejos para comprarse un arma. El Ministerio informó que el fiscal disponía de 10 efectivos de la Policía Federal para su custodia personal y que en las semanas previas a su muerte, Nisman denunció amenazas, por lo que la Procuración le ofreció incrementar ese número de custodios, pero el fiscal no aceptó.
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