“La Provincia de Córdoba lanzará un título para cancelar deudas con proveedores. Será transferible y podrá utilizarse para cancelar deudas tributarias vencidas hasta el 29 de Febrero de este año”, anunció esta noche el gobernador Juan Schiaretti a través de su cuenta de Twitter.
Los economistas oficialistas y opositores, ortodoxos y heterodoxos de la provincia de Córdoba no dudaron en calificar el anuncio de este título como una “cuasimoneda virtual”, que en la práctica funcionará como “dinero para el pago de impuestos”.
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Desde el Gobierno de Córdoba señalaron que las deudas con los proveedores son por unos $ 9.000 millones –son proveedores de servicios y de obra pública-; mientras que las acreencias llegan a los $ 29.000 millones, de los cuáles el 59% corresponde al pago del Impuesto Inmobiliario; el 30% a Ingresos Brutos; mientras que el Impuesto al Automotor se lleva otro 10% y queda un 1% de varios.
¿Vuelven los bonos como en la época de la hiperinflación alfonsinista o la crisis de 2001 con De la Rúa?, es la pregunta que rebotó en Córdoba y puso en alerta a las provincias del NOA, estructuralmente más desfavorecidas que la provincia gobernada por Juan Schiaretti, una potencia agroindustrial.
“No en los términos de billetes para pagar salarios de la administración pública. No van a empapelar Córdoba; aunque será un bono o título compulsivo porque los proveedores no podrán negarse a recibirlo; y en la práctica será una inyección de plata para pagar impuestos y que no caiga la recaudación”, señaló un economista cercano al ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano.
“Esta es una cuasimoneda que le permitirá a los acreedores del Estado cordobés pagar sus impuestos sin desembolsar el efectivo que hoy escasea, por la crisis nacional que dejó la economía de los últimos cuatro años; y por la pandemia del coronavirus. Va a ser dinero reabsorbido a través de los impuestos”, graficó a El Destape un economista de una importante consultora.
El bono será cancelado a los 36 meses, además tendrá un año de gracia y pagará según la tasa Badlar, la referencia que se usa en este tipo de créditos o de pago de plazos fijos de grandes clientes.
Otro economista señaló que “el título podrá ser transferido, comprado, vendido en el mercado de valores; generándose un mercado secundario; además podrá ser utilizado por sus tenedores como garantía para operaciones bancarias. Como tiene fecha de cancelación a los 36 meses con un año de gracia, también puede ser utilizado como instrumento de ahorro”.
Desde el oficialismo, un legislador confió: “Necesitamos una ley para llevar adelante la puesta en circulación de este título. Ya está listo el borrador que ingresará hoy o mañana a la Legislatura. Este título permitirá hacer frente a la caída de la recaudación; con la economía cerrada por la cuarentena; es difícil recaudar. No es una crisis cordobesa, sino es una pandemia mundial”.
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