El gasto público ayudó a compensar la caída en los salarios

20 de febrero, 2015 | 21.13
Por Ezequiel Orlando
Redacción El Destape
@ZetaOrlando

No fue 2014 un buen año para los salarios de los trabajadores, que negociaron alzas que le pelearon a la inflación. Esto fue matizado con ingresos secundarios de parte del Estado, que le dieron impulso a un consumo que hubiera caído en términos reales. Con la inflación calmada y la estabilidad cambiaria sin presión, los especialistas son optimistas para este 2015 electoral.

Por un lado, la inflación -según los pronósticos más pesimistas- avanzó 35%, impulsada por la devaluación del dólar de enero, lo que le restó poder de compra a los asalariados mantenerse a ritmo. Si bien los precios marcaron la cancha desde temprano, tuvieron una variación difícil de alcanzar.

Los sueldos subieron sólo 33,7%, de acuerdo al Indec. Es decir, que se acercaron a la variación de la canasta básica promedio relevada por consultoras privadas.

Si un sector no hubiera inyectado $ 115.000 millones, las consecuencias hubieran sido serias para los hogares. El gasto público le dio un impulso necesario al consumo, que en cifras oficiales aumentó 37,4%, también cerca de la inflación, pero levemente por encima.

"Es preocupante que los salarios reales no hayan mejorado porque es el corazón del modelo, junto con la política de ingresos" como las asignaciones familiar, universal por hijo y las jubilaciones, admitió Alejandro Robba a El Destape. De acuerdo a un estudio de la Gran Makro, el aporte estatal se destinó a la demanda agregada e hizo un aporte nada envidiable, de 2,7% en el PBI.

El economista es optimista para este año, en el que se suaviza el ritmo acelerado de los precios. Además, la estabilidad del tipo de cambio oficial no presiona a los productos importados y la del blue a las expectativas empresarias.

"Al mirar la inflacion 2014, las paritarias cerrarán por arriba que la que habrá este año", espera Robba. Los próximos meses serán clave, cuando cierren las negociaciones de los gremios más numerosos que recién entran en calor luego del verano.

Para uno de los investigadores de la organización oficialista, la industria podrá recuperar parte de lo perdido "sólo si se consolida este despertar de la demanda interna". La fría actividad económica brasileña por ahora no va a echarle una mano a la nacional, por lo que las paritarias próximas y el gasto público volverán a ser un sostén importante de la economía.