La represión llevada a cabo este lunes contra manifestantes que se movilizaron en contra de la reforma previsional dejó expuesta la violencia de género ejercida por parte de las fuerzas de seguridad.
El periodista Sebastián Lacunza reconstruyó en Página/12 el caso de Paula Urbandt, quien fue víctima del abuso policial. "Hija de puta, ¿qué hacés acá? Contame pupita", fueron las palabras que recibió por parte de un efectivo de seguridad.
Urbandt fue a la marcha junto a su hijo Mateo Ressi, de 18 años. Ni bien salieron de un subte donde se encontraban refugiados, los policías comenzaron a provocarlos con toda clase de frases inapropiadas. "¿No tenés ganas de empujarme?, empujame, dale", fueron algunas de las frases que lanzaron.
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Según reconstruye el periodista Lacunza, los policías le tiraban besos, le guiñaban el ojo y se acercaban ante Urbandt. Mientras se encontraba maniatada en el piso, la mujer exclamaba: “Vení a decirme en la cara lo que me dijiste. Vos, hijo de puta, decímelo acá”.