El Frente Amplio ganó en Uruguay pero va a un difícil balotaje contra la derecha

La coalición de centroizquierda obtuvo el 40,7% de los votos, contra el 29,68% del Partido Nacional. Panorama complejo para el país oriental. 

28 de octubre, 2019 | 12.36

El próximo presidente de Uruguay surgirá de una segunda vuelta electoral el 24 de noviembre, de acuerdo con los cómputos oficiales finales difundidos este domingo, en paralelo con las elecciones de Argentina. El Frente Amplio, si bien obtuvo una victoria por poco más de 10 puntos sobre el Partido Nacional, enfrentará un balotaje incierto ante la cosecha del Partido Blanco y el ultraderechista Cabildo Abierto. 

Con prácticamente el 100% de las mesas escrutadas, Daniel Martínez, del oficialista Frente Amplió, reunió el 40,7 % de los votos frente al 29,68% en favor del candidato por el Partido Nacional o Blanco (PN), Luis Lacalle Pou, que será su contendiente para la segunda vuelta.

En tercer y cuarto puesto quedaron los aspirantes del Partido Colorado (PC), Ernesto Talvi (12,8%) y el general Guido Manini Ríos, de Cabildo Abierto (11,3%). Históricamente, los votantes del Partido Blanco y el Colorado se unen en una segunda vuelta contra el Frente Amplio, y la irrupción del partido de ultraderecha, defensor de la dictadura militar en Uruguay, pone al gobierno progresista en un escenario complejo para una eventual segunda vuelta. 

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Efectivamente, la alianza "multicolor" propuesta por el líder nacionalista tras conocer el apoyo explícito de Talvi, y de Cabildo Abierto superaría en votos al líder del FA en la segunda vuelta, razón por la cual el resultado oficial dejó más confiada a la oposición que al oficialismo, que gobierna Uruguay desde 2005. 

Anoche mismo Talvi y Manini manifestaron públicamente su intención de apoyar al candidato del PN, mientras en todos los campamentos partidarios se hacían cálculos acerca del reparto de bancas en el Senado y en Diputados.

El discurso del militar, desplazado de la jefatura del Ejército por el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, por criticar el trato de la Justicia a los casos de represión ilegal castrense, ha calado en un amplio sector de la población preocupado por una suba en los índices de delitos urbanos.