La línea 60 de colectivos, que une al norte del conurbano bonaerense con la zona sur de Capital Federal,
volvió a funcionar en la madrugada de este jueves tras estar paralizada durante 42 días debido a un arduo conflicto entre la empresa Monsa SA y los delegados de los trabajadores en reclamo de más de 50 despidos.
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A las 0 horas de este lluvioso jueves, y tras el acuerdo rubricado junto al ministerio de Trabajo, los choferes retomaron sus tareas tras tener detenido el servicio. La conciliación obligatoria es por el plazo de diez días hábiles.
El titular de la cartera laboral, Carlos Tomada, evaluó que durante las negociaciones hubo "una altísima intransigencia" de la empresa Monsa, del cuerpo de delegados y de la UTA, opositores al cuerpo de delegados de izquierda de la línea 60. A su vez, aseguró que el conflicto se resolvió porque las partes "entendieron que se estaban cavando una fosa".
El 60, que transporta a unas 250.000 personas por día, estuvo detenido por el despido de más de 50 trabajadores que ocasionó la protesta de los empleados, que primero detuvieron el servicio y luego querían sacar las unidades a la calle sin cobrar boleto, algo que a lo que la empresa se opuso y por eso el conflicto se extendió, al punto de que los empleados llegaron a cortar la autopista Panamericana y fueron reprimidos por Gendarmería.
El acuerdo tripartito establece la reincorporación de todos los trabajadores despedidos, garantía del uso de la licencia gremial, pago de un anticipo salarial en dos cuotas y cobro de las asignaciones familiares correspondientes al período del conflicto. El vencimiento de la "tregua" es el viernes 14 de agosto.
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