Bajo la consigna “Des-igualdades, desarrollo y economía popular en Argentina y en el contexto latinoamericano”, se realizó en el Instituto Gino Germani de la UBA un encuentro de trabajo que buscó generar un espacio de debate entre académicos, referentes y políticos sobre una agenda de indudable interés local y regional.
Los ejes propuestos para el debate se centraron: a) el panorama de la desigualdad, desarrollo y economía popular en Argentina y en el contexto latinoamericano; b) los debates actuales y ausentes de agenda de investigación y gestión sobre la temática; y c) las alternativas de lineamientos de políticas públicas.
Los principales expositores fueron Martín Guzmán (Doctor en Economía e investigador de la Universidad de Columbia), Mariana Heredia (Doctora en Sociología e investigadora adjunta del CONICET) y Pablo Chena (Doctor en Economía y Ciencias Sociales, investigador del Conicet y miembro de la Mesa de Economía del Movimiento Evita).
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Chena se apuntó al origen del concepto de economía popular al que relacionó a la praxis política, pero advirtió que está siendo discutido en ámbitos académicos. En ese sentido, marcó que "dicha praxis no se asocia sólo a una actividad económica sino a la constitución de un 'sujeto político' de la economía popular que comprende a casi la mitad de los trabajadores en América Latina". Y precisó: "La economía popular comprende al 40% de los trabajadores en Argentina, al 70% en Bolivia, al 45% en México y al 60% en Perú".
Por su parte, Heredia señaló que "en la coyuntura actual de nuestro país es indispensable ahondar en debates sin tantas antinomias" y se refirió a las desigualdades remarcó que "debemos estar atentos a un proceso más global que tiende a mantener y a cristalizar estructuras sociales cada vez más desiguales".
Al apuntar sobre el concepto de desarrollo, la especialista remarcó que "es necesario pensarlo más ligado al empleo en el sector servicios y construcción y, por tanto, no limitar la idea de desarrollo a la industrialización".
Por último, Guzmán señaló que “para pensar el desarrollo sano, inclusivo y dinámico es necesario que la estructura productiva genere pleno empleo, cambio tecnológico y resulte compatible con una estrategia macroeconómicamente consistente”. En base a esto, citó como ejemplo el proceso ejecutado en Korea, aunque advirtió que “el camino koreano hoy es irreplicable, por la complejidad propia de la intensificación de la inteligencia artificial aplicada a las cadenas de producción y por las condiciones del contexto internacional”.
Sobre esto último, Martin Navarro, integrante de la Mesa de Economía del Movimiento Evita, consignó que “vivimos en un mundo donde se piensa más en el desarrollo tradicional que en nuevos formatos de la economía” y consideró que “tiene que haber un desarrollo de la industria que entienda que lo principal no tiene que ser la tecnología sino la opción del trabajo donde aparecen nuevos servicios aplicados a la industria”.
La actividad se efectuó en el marco del “Ciclo de Desayunos de Coyuntura” del Instituto Gino Germani (IIGG) y fue organizada por la Secretaría de Estudios Avanzados de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y el Centro de Estudios y Desarrollo de Políticas (CEDEP). La apertura del evento estuvo a cargo de la Carolina Mera (IIGG) y de las organizadoras, Mercedes Di Virgilio (SEA) y Roxana Mazzola (UBA y CEDEP).
"El objetivo de la actividad fue plantear el debate de cuál es el modelo opcional al actual, que no sea el camino del recorte presupuestario y que no tenga que ver sólo con la industrialización. En ese marco discutir cómo encaja la economía popular y repensar los instrumentos sobre qué líneas de políticas públicas se desarrollan", evaluó Mazzola.
A modo de síntesis quedaron planteadas las siguientes cuestiones:
- Desarrollo: se planteó qué hacer para generar crecimiento económico en el contexto de la crisis del modelo industrial y financiero global.
- Generación de trabajo: quedó pendiente profundizar si la alternativa se trata de “un modelo de servicios o industrialista”, acentuando la necesidad de repensar esquemas.
- Economía popular: se resaltó la importancia del reconocimiento del “sujeto nuevo” que expresan los trabajadores de la economía popular y se advirtió respecto a los riesgos de no institucionalizar un estatus de ciudadanía de segunda clase.