El represor Eduardo Ascheri, imputado en la causa que investiga el secuestro y desaparición de militantes montoneros durante la Contraofensiva, fue descubierto violando su arresto domiciliario.
Los abogados de la querella le solicitaron al Tribunal Oral Federal N°14 de San Martín que se le revoque ese beneficio.
El genocida fue fotografiado por Gustavo Molfino, uno de los querellantes, caminando por la calle y en un bar cerca del tribunal.
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Ascheri fue Jefe de la División Planes del Departamento de Inteligencia (G2) del Comando de Institutos Militares desde el 16 de octubre de 1978 hasta el 29 de noviembre de 1979. Está acusado de 33 privaciones ilegítimas de la libertad agravadas, en 27 de esos casos doblemente agravado, seis allanamientos y 29 homicidios.
Según alertó el portal Página 12, todos los represores que están juzgados por delitos de lesa humanidad en esta causa cuentan con el beneficio de la prisión domiciliaria.
El abogado de la querella, Pablo Llonto, solicitó al TOF 4 que revoque el beneficio de Ascheri por la violación a su prisión domiciliaria. Además pidió que se coloque el dispositivo de control necesario ya que la libertad de la que gozaba el genocida "pone en riesgo a las víctimas".