De Vido mantuvo reuniones bilaterales con Rusia y China

15 de septiembre, 2015 | 17.59
El ministro de Planificación, Julio De Vido, en el marco de su visita a la ciudad de Viena, Austria, con motivo de la 59 conferencia general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), continuó con su agenda. Mantuvo reuniones bilaterales con Rusia y China además de presentar el método "ABACC-Cristallini" desarrollado en forma conjunta con Brasil.

Al inicio de la jornada el ministro visitó el stand de la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos Espaciales, donde fue recibido por el jefe de Sección de Políticas y Asuntos Legales de UN-OOSA, Niklas Hedman. Niklas Hedman destacó la presencia de Argentina allí con maquetas de Tronador 2 y ARSAT-1 demostrando su "importancia regional en materia espacial".

Luego, De Vido mantuvo una reunión con D. Dazhe XU, directivo de la Corporación Nacional Nuclear China (CNNC) junto a su delegación argentina. En dicho encuentro, se mantuvieron diálogos entre ambos países para desarrollar avances en la cuarta y quinta central nuclear en el país.

Finalizado el encuentro con los representantes del gobierno chino, De Vido afirmó ante la prensa que "se avanzó para que en el último trimestre del año se firme el contrato de financiamiento de Atucha III y el convenio marco que daría inicio a las negociaciones del contrato de financiamiento de la quinta central nuclear".

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Como parte de esta reunión participó también el embajador Argentino en Viena Rafael Grossi, y los titulares de la Comisión Nacional de Energía Atómica, Norma Boero; y la empresa estatal Nucleoeléctrica Argentina, José Luis Antúnez.

Posteriormente, encabezó la presentación del método "ABACC-Cristallini", desarrollado por el grupo binacional argentino-brasilero ABACC, organismo integrado por Argentina y Brasil, responsable de verificar uso pacífico de este tipo de materiales entre ambos países. Contó con la presencia del director general de la OIEA, Yukiya Amano, entre otras autoridades.

En ese sentido, De Vido reconoció que "el trabajo conjunto que la Argentina y Brasil llevan adelante en pos de algo tan importante porque da seguridad, credibilidad y valida la actividad nuclear en el mundo, un desarrollo científico latinoamericano".

El método permite el muestreo de Hexafluoruro de uranio (UF6) y lleva el nombre de Osvaldo Cristallini, científico Argentino que desarrolló esta técnica para verificar la presencia de material que indique usos no pacíficos de la energía nuclear. Osvaldo Cristallini, especializado en Química Nuclear, trabajó en la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) en 1959 y en el ABACC en 1992, siendo reconocido como investigador emérito de la CNEA en 1995.

Estuvieron presentes en esta reunión el jefe de la División de Operaciones de la OIEA, Van Zyl Dvilliers; el Embajador Argentino en Viena Dr. Rafael Grossi; el Embajador de Brasil ante OIEA Dr. Laercio Vinhas; el Secretario Argentino de ABACC, Sergio Solmesky; el Secretario Brasilero de ABACC, Odilon Antonio Marcuzzo Do Canto; el Director General Adjunto de Salvaguardia, Tero Varjoranta y los titulares de la Comisión Nacional Argentina, Norma Boero y de Nucleoeléctrica Argentina SA, José Luis Antúnez.

Más tarde, en la reunión de trabajo que mantuvo el ministro de Planificación Federal con el director general de empresa nuclear rusa ROSATOM, Sergei Kirienko, donde repasaron los avances en los acuerdos bilaterales entre ambos países, destacó que “estamos trabajando para la sexta central nuclear, que está en los acuerdos firmados entre los Presidentes”.

Por último, en declaraciones a los medios, precisó que “la Presidenta y Néstor han llevado adelante una política totalmente plural, abierta en materia internacional, donde lo único que prima, lo único que interesa es el interés del país; no el aliarnos en bloque para generar procesos de dominación económica”. Y agregó que “Nosotros lo que queremos es aliarnos con países para generar procesos de sinergia. Está claro que los chinos hacen negocio vendiéndonos un reactor, o los rusos, pero nosotros también, el 70% de la industria que participa en la construcción de la cuarta central nuclear es nacional y el 50% de la quinta también. Eso es una política soberana, autónoma, con financiamiento externo”.