De Videla a la Mano de Dios: el fotógrafo que vio todo

30 de mayo, 2017 | 12.41

Entre 1979 y 2015, Eduardo Longoni retrató como pocos los acontecimientos que marcaron al país: la represión a las Madres, la complicidad eclesiástica con la dictadura, el gol de Diego Maradona a los ingleses y la desaparición (en democracia) de dos guerrilleros en La Tablada, entre otros.

Desde los primeros días de abril, su trabajo aparece en formato de libro: Imágenes Apuntadas, editado por Planeta, reúne 26 de las mejores fotos tomadas por Longoni en los últimos 38 años.

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

ATENTADO A ALEMANN.

Su “bautismo de fuego”, tal como describe, fue en el ‘79 cuando ingresó como reportero a la Agencia Noticias Argentinas (NA) y lo enviaron a cubrir un atentado guerrillero al entonces viceministro de Economía de la dictadura, Juan Alemann: “Yo me mezclé entre los custodios de (José Alfredo, ministro de Economía) Martínez de Hoz hasta que me paró un oficial del Ejército y me preguntó dónde iba. Yo le dije, no sé por qué, que era el fotógrafo del Primer Cuerpo del Ejército en un momento el que tenía 20 años, no tenía documento, en plena dictadura y durante un atentado guerrillero”.

VIDELA EN STELLA MARIS.

Durante el quinto aniversario del golpe, en 1981, Longoni consiguió retratar a Jorge Rafael Videla rezando en una misa homenaje a los oficiales caídos víctimas “de la subversión”. La imagen, que suele replicarse cada vez que se recuerda la complicidad ecleciástica con las cúpulas militares, se tomó en la capilla Stella Maris: “Yo quería componer esa foto con alguna jerarquía de la Iglesia Católica que le estaba dando, de alguna manera, apoyo a Videla”.

DÍA DEL EJÉRCITO.

La foto que ilustra Imágenes Apuntadas es la de un grupo de militares que parecen observar el lente de Longoni durante un acto por el Día del Ejército en 1981 en el Edificio Del Libertador: “Lo que hice fue casi un juego. Me di vuelta con un teleobjetivo con el que yo estaba fotografiando al general y me encontré con esas caras que estaban mirándolo”, recuerda Longoni. “Copié esa foto y a Miguel Ángel Cuarterolo, que era mi editor, le encantó y me dijo no podíamos usarla. La agencia NA, que era bastante progresista en tiempos de la dictadura, se cuidaba con cierta autocensura para seguir funcionando y no ser clausurada”.

REPRESIÓN A LAS MADRES.

Otras las imágenes más impactantes del libro es la de un grupo de Madres de Plaza de Mayo asesiadas por policías a caballo durante La Marcha por la Vida, en 1982: “Es una foto a la que yo le tengo mucho cariño pero me acuerdo que mis colegas de NA, que eran más grandes que yo, me retaron mucho cuando volví porque está hecha desde el punto de vista del manifestante”, explica Longoni. “Yo estaba tan cerca que los caballos, que estaban atrás mío, me tiraron y fui a terminar a sus patas”.

LA MANO DE DIOS.

En 1986, en pleno mundial de fútbol en México, probablemente sin buscarlo Longoni inmortilizó la imagen de Maradona y “la mano de Dios” ante Inglaterra durante los cuartos de final: “Es una foto extraña dentro de mi fotografía. Si bien hacía fotos de Deportes no era lo que más me gustaba”, señala Longoni.

EL SUEÑO DE ESTELA DE CARLOTTO.

La imagen que cierra el recorrido fotográfico de Longoni es de 2014. Se la ve a la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, junto a su nieto recuperado Ignacio Montoya Carlotto: “Forma parte de una foto que me reconcilió con la fotografía. Hacia un año y medio que estaba personalmente bajoneado y había dejado de fotografiar. Estaba dando clases en mi taller de fotografía y había bajado para ir al diario y escuché que estaban dando la conferencia de prensa”, recuerda. “Me gusta esa foto, que es la única foto inédita, porque las fotos que salieron son de ellos dos abrazados y sonriendo, pero a mí lo que parece que en esta foto, donde ella está con los ojos cerrados y rezando, está el sueño de Estela”.

Entrevista con Eduardo Longoni en El Destape:

Embed