Crisis en Perú: el Congreso suspendió al presidente Martín Vizcarra y designó a una presidenta interina

Luego del anuncio del presidente de Perú, Martín Vizcarra, de disolver el Congreso de Perú y llamar a elecciones para renovar a todo el Poder Legislativo, el Congreso contraatacó y decidió la suspensión del mandatario y su reemplazo en forma interina por la legisladora Mercedes Aráoz. El choque entre poderes en el país incaico terminará definido por el Tribunal Constitucional (la Corte Suprema). 

Vizcarra, que reemplazó a Pedro Pablo Kuczynski en 2018 tras su renuncia, había llamado a elecciones legislativas luego de una moción de censura del Congreso a su presidente del Consejo de Ministros (su jefe de gabinete) y determinó la "disolución constitucional" del mismo. El Congreso, con mayoría fujimorista, decidió a última hora del lunes por suspenderlo y nombrar a Aráoz, que integrara el gabinete de Kuczynski en 2017. 

“En respeto irrestricto de la Constitución Política de Perú, he decidido disolver constitucionalmente el Congreso y llamar a elecciones de congresistas de la República. Este es un acto constitucional”, dijo el (ahora ex) presidente peruano, al agudizarse un choque de poderes iniciado hace tres años y cerrarse las vías de entendimiento entre el Ejecutivo y el Legislativo.

“Es claro que la obstrucción y blindaje (del Congreso) no cesan y no habrá acuerdo posible”, sostuvo Vizcarra, mientras centenares de manifestantes congregados afuera del Parlamento celebraban su decisión, informó la agencia de noticias EFE.

Según la Constitución de Perú, el presidente puede convocar a nuevas elecciones ante reiterados rechazos a mociones de confianza de parte del Poder legislativo, y el Congreso puede suspender al presidente si disuelve al Congreso por fuera de los supuestos previstos en su Carta Magna. Por una cuestión de tiempos, cada parte dice haber actuado bajo el mandato constitucional y acusa al otro de haber actuado por fuera de la ley. Por eso, será ahora el Tribunal Constitucional que deberá definirlo. 

Y aquí entra en juego la intención de algunos legisladores, cercanos a Fujimori, de querer nombrar a nuevos jueces al Tribunal Constitucional. La decisión de los legisladores afecta a Vizcarra por un año de plazo.