El primer caso de coronavirus en Argentina pasó por todas las pruebas correspondientes para su correcta confirmación. Ante los síntomas de la infección, ya existe un protocolo a seguir con estudios que develan la existencia de un contagio luego de su aislamiento.
Los síntomas a los que hay que estar atentos son: fiebre, tos, falta de aire, dolor de garganta, dolores de cabeza. En el caso de presentar estas características, el médico puede pedir que se use un barbijo, como también opinará si debe tomar otras medidas para evitar propagar la infección.
Si el médico cree que usted podría estar infectado con coronavirus, se comunicará con un departamento de salud cercano para obtener instrucciones sobre las pruebas. Lo más probable es que haya que asistir a un laboratorio especial para hacérselas. Solo ciertos laboratorios tienen permiso para hacer pruebas de COVID-19.
Hay varias maneras en que un laboratorio puede obtener una muestra para el análisis:
- Muestra con hisopo: El profesional de la salud usa un hisopo especial para tomar una muestra de la nariz o la garganta
- Aspirado nasal: El profesional de salud inyecta una solución salina en la nariz y luego extrae una muestra succionando con cuidado
- Aspirado traqueal: El profesional de la salud introduce un tubo delgado con luz en su extremo (broncoscopio) por la boca hasta los pulmones para tomar una muestra
- Prueba de esputo: El esputo es la mucosidad espesa que se expulsa de los pulmones al toser. Se le puede pedir que expectore en una taza especial o se puede obtener una muestra de la nariz usando un hisopo especial
- Prueba de sangre: El profesional de la salud toma una muestra de sangre de una vena de un brazo
Tras los múltiples casos de la infección, se desarolló una prueba rápida de COVID-19. Utiliza muestras de la nariz, la garganta o los pulmones y permite hacer un diagnóstico rápido y preciso del virus.
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