Luego de dos reuniones con la mesa de enlace, el Gobierno aumentará las retenciones a la soja al 33%. La suba será de tres puntos, lo que equivale al 10%, y se aplicará sólo para los grandes productores, mientras que la gran mayoría abonará menos. El presidente Alberto Fernández le había exigido al sector agropecuario que haga un “esfuerzo” para permitir la redistribución de la riqueza. El “campo” aumentó sus ganancias 870% en los últimos cuatro años.
El ministro de Agricultura, Luis Basterra, incrementará el arancel a la soja y sus derivados tres puntos, de modo que lo llevará desde el 30% actual al 33%. Establecerá un sistema de compensación a los pequeños productores, según le comunicó a los dirigentes rurales.
Los chacareros que producen más de 1.000 toneladas pagarán el incremento de las retenciones. Este grupo lo integran 14.884, es decir, el 26%, y genera el 77% de la soja en Argentina.
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En cambio, el 74% de los productores restantes (42.406 pequeños y medianos), que cosechan el 23% de la oleaginosa, tendrán menos o el mismo arancel. Quienes generan menos de 100 toneladas pagarán sólo 21% de retenciones; entre 100 y 200 toneladas, 24%; entre 200 y 300 toneladas, 27%; entre 300 y 400 toneladas, 28%; entre 400 y 500 toneladas, 29%. El Ejecutivo les mantendrá el arancel a quienes producen entre 500 y 1.000 toneladas.
Basterra estableció, en paralelo, una merma de los derechos de exportación de la semilla de girasol del 12% al 7% y del aceite al 5%.
En la apertura de sesiones ordinarias del Congreso el domingo pasado, el jefe de Estado planteó que “el campo debe ser un protagonista. Los hemos convocado para que participen en la lucha contra el hambre. Pero también deben hacer el esfuerzo quienes producen y exportan. Que el campo crezca es uno de nuestros objetivos”. En ese marco, se refirió a las negociaciones por la suba de los derechos de exportación y remarcó: “Hemos hecho una propuesta generosa en materia de derechos de exportación en la que solo se incrementa uno de un total de 25 cultivos que hoy están afectados por esos derechos. La propuesta respeta en un todo las condiciones que nos fueran impuestas por la Ley de Solidaridad. Eso resulta favorable para muchos cultivos pero especialmente para el desarrollo de las economías regionales”.
Como publicó El Destape, el sector en su totalidad disparó sus márgenes 870% entre 2015 y 2019, tres veces por encima de la inflación de ese período. Las ganancias medidas en dólares se dispararon 48% luego de cuatro años de macrismo. Uno de los factores que más incidió fue la eliminación de las retenciones para algunos cultivos y baja para la soja que implementó Cambiemos.
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