El Tribunal Oral Federal N° 4 de la Capital Federal condenó al ex vicepresidente Amado Boudou a cinco años y 10 meses de prisión por la causa Ciccone Calcográfica. El tribunal ordenó la inmediata detención del exfuncionario acusado de cohecho pasivo y condenado a inahabilitación perpetua a ejercer cargos públicos.
"Hay una revancha de clase, una alección. Me han dicho durante mucho tiempo que no me iban a perdonar la estatización de las AFJP. Hoy en el gobierno hay muchos funcionarios que estaban en las AFJP", sostuvo Boudou antes de escuchar el veredicto.
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Rechazada ya la recusación que Boudou había hecho del juez Pablo Bertuzzi, el Tribunal Oral Federal N° 4 de la Capital Federal escuchó desde las 9:30 los alegatos finales de los imputados.
La Fiscalía y las querellas, de las cuales la Unidad de Información Financiera (UIF), solicitaron la inmediata detención del ex vicepresidente sin esperar a que quede firme el fallo.
El fiscal de juicio Marcelo Colombo y la Oficina Anticorrupción (OA) pidieron una pena de pena de cinco años y medio para Boudou y la UIF de seis años, acusándolo de los delitos de cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública.
Según la acusación, mientras ocupaba el cargo de ministro de Economía, Boudou -a través de su amigo Carmona y el abogado Vandenbroele como intermediarios- se interesó por la adquisición del 70 por ciento de las acciones de la quebrada compañía encargada de la impresión de papel moneda, por lo que puso en marcha su salvataje.
Boudou negó siempre la imputación, de igual modo que conocer a Vandenbroele: sostuvo que el levantamiento de la quiebra estuvo vinculado a fondos del banquero Raúl Moneta.