El presidente saliente, Mauricio Macri, no escatimó en vacaciones durante su gestión y se tomó 160 días, equivalentes a casi el descanso de tres trabajadores.
Las vacaciones fueron una constante desde el principio de su mandato, tanto que con apenas 15 días de trabajo ya se fue a Villa La Angostura, aunque debió viajar de urgencia por las inundaciones en el Litoral. Allí se sacó fotos desde un helicóptero y lanzó la polémica frase "hay lugares donde sobra el agua y lugares donde falta".
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No en vano el jefe de Estado que abandona el gobierno este 10 de diciembre recibió el apodo de 'Domador de reposeras' por parte del intendente de Tafí Viejo, Javier Noguera. Sus destinos preferidos fueron la Patagonia, Tandil, Córdoba y la residencia presidencial de Chapadmalal, donde incluso festejó su cumpleaños 60.
También aprovechó las visitas y viajes oficiales para meter "escapadas". Quizás la más icónica fue cuando viajó a Sudáfrica para una cumbre de los BRICS y luego se quedó para hacer un zafari fotográfico en el Parque Kruger.
El verano fue su época preferida para "descansar". Entre diciembre de 2018 y enero de 2019, Macri se tonmó 24 días de vacaciones en el lujoso country Cumelén de Villa La Angostura y disimuló con algunas reuniones. A fines de enero, y luego de trabajar 10 días se fue a la playa.
Y aunque incluso se animó a decir que como presidente "no existen las vacaciones" porque uno "no puede desenchufarse", una vez terminado su mandato, él ya tiene decidido su lugar para pasar el fin de año. Por supuesto que es su "lugar en el mundo", Villa La Angostura.
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