En el juicio por la muerte de la periodista Débora Pérez Volpin, la Justicia condenó al endoscopista Diego Bialolenkier a tres años de prisión en suspenso y a siete años y medio de inhabilitación para ejercer su profesión. En tanto, la anestesista Nélida Inés Puente fue absuelta.
Según confirmó el abogado querellante, Diego Perota, apelarán el fallo de Puente por considerar que tiene responsabilidad en la muerte.
En diálogo con los medios, confirmó además, que no apelarán la condena del endoscopista porque "no están buscando venganza".
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"Sabemos sin duda que el análisis que ha tenido que hacer el juez tiene basamento en los estudios de los peritos, pero lo queremos leer", aseguró Perota en referencia al 9 de agosto, fecha en la que se leerán los argumentos de estas sentencias.
En un principio, se habían pedido cuatro años y cinco meses de prisión para Bialolenkier y tres en suspenso, para Puente. También habían solicitado que ambos profesionales queden inhabilitados para ejercer durante un período de diez años y que se juzgue por falso testimonio a la instrumentadora ante las irregularidades en su declaración.
En tanto, el abogado de Puente afirmó tras conocerse la sentencia: "se dio lo que esperábamos porque aquí no había habido ninguna responsabilidad por parte de la endoscopista".
"Ella fue la primera en presentarse, contó todo y quedó demostrado que su accionar fue perfecto, tanto en el procedimiento anestésico como en la reanimación", apuntó.
El alegato de la querella incluyó un pedido de encubrimiento contra las autoridades del Sanatorio de La Trinidad.
Débora murió el 6 de febrero de 2018 tras realizarse una videoendoscopía digestiva alta.
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