Caso José López: llaman a indagatoria a las monjas del convento

13 de julio, 2016 | 08.19
Tras el revelador video que muestra cómo José López ingresaba al convento de General Rodríguez con bolsos de 9 millones de dólares, el fiscal Federico Delgado pidió la declaración indagatoria de dos de las monjas que ayudaron al ex funcionario el pasado14 de junio.

El requerimiento del fiscal abarca también a la suegra y esposa de López y dos presuntos testaferros.

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE


"Tres personas ingresaron al proceso desde hace tiempo por sospechas de complicidad con el enriquecimiento ilícito de José López. Se trata de María Amalia Díaz, Andrés Galera y Eduardo Gutiérrez. Las dos restantes irrumpieron la noche del 14 de junio, se trata de Alba Día de España Martínez Fernández (conocida como "Madre Alba") y Celia Inés Aparicio ("Hermana Inés"), quienes colaboraron con López para ocultar los rastros del delito", indicó la Fiscalía.
López está procesado por enriquecimiento ilícito, medida que dispuso el juez Daniel Rafecas tras ser detenido en el oeste bonaerense.

LEE MÁS "El video del momento en que José López ingresaba al convento"
Delgado pidió la indagatoria de Amalia Díaz, esposa del ex secretario de Obras Públicas, porque ésta mantuvo contacto telefónico fluido con López en las horas previas al episodio de los bolsos en General Rodríguez. "Esto quiere decir que Díaz estaba al tanto que su marido intentaría borrar pruebas de su enriquecimiento espurio", sostuvo el funcionario judicial.

Además de las comunicaciones también tuvo en cuenta que, durante esas horas, Díaz "en miras a ocultar los millones de dólares que tenía" López "entabló varias conversaciones telefónicas con Alba Día de España Martínez Fernández, conocida como madre Alba".

"Esos contactos, en apariencia inocuos, adquieren preponderancia porque la "Madre Alba" no sólo vivía en el monasterio "Nuestra Señora de Fátima" de General Rodríguez sino se encontraba a su cargo. Es decir, era responsable del lugar elegido por López para esconder su botín", añadió Delgado.
Además, "las monjas no se limitaron a monitorear la llegada de López al convento, también lo recibieron y ayudaron a ingresar el dinero a la casa".