La selva del Amazonas se ve amenazada por un creciente incendio que preocupa a todo el escenario mundial debido a la importancia que tiene este ecosistema en el equilibrio ambiental de la Tierra. Por eso, el presidente Jair Bolsonaro tuvo que salir a dar alguna explicación del caso y estalló la polémica cuando culpó, sin ninguna prueba, a las ONG's que buscan "llamar la atención" contra el gobierno de Brasil.
Según Bolsonaro, el retiro del dinero destinado a las organizaciones no gubernamentales es lo que podría justificar una reacción de su parte: "El crimen existe, así que tenemos que hacer todo lo posible para que este crimen no aumente, pero tomamos dinero de las ONG. De las transferencias del exterior, el 40% fue a las ONG. También terminamos la transferencia de dinero público. Entonces, estas personas se están perdiendo el dinero", aseguró el mandatario, desde el Palacio da Alvorada.
También afirmó que sus sospecha es que los incendios forestales están destinados a enviar las imágenes al extranjero. Cuando se le preguntó si hay una investigación sobre el tema, dijo que ese caso no tiene registros escritos: "El fuego ha sido tocado, al parecer, en lugares estratégicos. Hay imágenes de todo el Amazonas. ¿Cómo puede ser? Tampoco sería posible que todos los lugares estuvieran en llamas para filmar y enviarlo". allí la gente para disparar y prender fuego", dijo, y admitió no tener ningún documento para argumentar su denuncia.
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Según Bolsonaro, el gobierno "no es insensible" a los incendios y evalúa las medidas que deben tomarse con los Ministerios de Defensa y Medio Ambiente. También dijo que las ONG representan "intereses de fuera de Brasil".
“No estoy diciendo que las ONG son responsables de los incendios. Tenemos que luchar contra el crimen, luego veremos quién es responsable del crimen. Pero, en mi opinión, hay interés de estas ONG, que representan intereses de fuera de Brasil ", concluyó.
El fuego está destruyendo "el pulmón del planeta" a una velocidad récord: solo en lo que va de año se han producido más de 40.000 incendios en la zona de la Amazonía brasileña, más de la mitad de los que ha habido en todo el país (72.000 hasta agosto).
El Instituto Nacional de Investigación Espacial (INPE) de Brasil reconoce que los incendios han aumentado en lo que va de año más del 80% si lo comparamos con el mismo período de 2018.
Estos datos que no le gustaron nada al presidente, que en respuesta despidió al director del INPE, Ricardo Galvao, el pasado 2 de agosto tras la publicación del informe, acusándole de fabricar los datos a base de mentiras.
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