El ministro de Energía, Juan José Aranguren, insistió con que no había "incompatibilidad" entre sus funciones públicas y la posesión de acciones de la petrolera Shell. No obstante, confirmó que las vendió por la recomendación de la Oficina Anticorrupción.
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Consultado por periodistas en los pasillos del Centro Cultural Kirchner por el "Mini Davos", Aranguren explicó que la decisión la tomó "a partir de conocer la recomendación de la OA", que preside Laura Alonso.
"La OA consideró, obviamente como considero yo, que no tengo incompatibilidad o conflicto de interés, tanto por haber estado empleado en una empresa privada hasta el 30 de junio como por tener acciones de esa compañía, como por el hecho de que durante estos nueve meses las decisiones que he tomado no han afectado particularmente a esa empresa, sino que fueron decisiones de carácter general", opinó el funcionario.
El titular de Energía está investigado por una denuncia de los diputados Martín Doñate y Rodolfo Tailhade por violar la Ley de Ética Pública al beneficiar a Shell con la importación de gas y el tarifazo. El ministro no sólo infringió la norma al poseer acciones de la petrolera, sino también al haber sido su presidente ejecutivo seis meses antes de asumir en el Estado, pese a que debían haber pasado tres años.