Varios domicilios de la empresa que comercializa la gaseosa Manaos fueron allanados entre el pasado miércoles y este jueves debido a una investigación de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) por una presunta evasión impositiva, que sumaría unos $ 900 millones.
Según informó la AFIP, el operativo fue llevado adelante por el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional 3 de Morón, a cargo de Néstor Barral. Constó de 14 allanamientos "a domicilios administrativos y la planta comercial de la comercializadora de gaseosas Manaos, como así también los domicilios relacionados con las personas vinculadas a la firma".
El presidente Mauricio Macri había visitado la planta que la empresa tiene en La Mantanza en agosto de 2016, cuando ya era investigada por AFIP. En aquella oportunidad Macri utilizó el eslogan de la gaseosa y apuntó: "Vamos Manaos, vamos Argentina".
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
El organismo recaudador señaló que la intervención judicial fue producto de "la verificación de importantes desvíos financieros e inconsistencias impositivas que hacen presumir la comisión del delito de evasión", al tiempo que consideró que podría existir "una firma paralela, sin estructura y capacidad económica y financiera, a través de la cual canalizaría ventas marginales".
Según detalló el diario La Nación, fuentes de la empresa que se hizo conocida por sus publicidades con famosos argentinos "habría armado una sociedad paralela a Refres Now, que comercializa Manaos, que se llama The Ultimate Gaseous, para facturar en forma paralela y no cuenta con estructura para operar". Según una estimación se habrían facturado más de $ 500 millones, mientras que los registros bancarios no superan los $ 10 millones. Además, Miguel Canido, quien se muestra en público como el líder de la empresa, "no aparece en los papeles de la sociedad".
Los operativos se realizaron en la Ciudad de Buenos Aires y en las zonas oeste y norte del Conurbano bonaerense, con la participación de agentes de la AFIP y de Gendarmería Nacional.
En el procedimiento se "secuestraron elementos relevantes para la investigación, tales como libros contables, escrituras, documentación relacionada a la hipótesis delictiva denunciada y soportes informáticos".