Un trabajador del subte se electrocutó mientras realizaba tareas de desasbestización y se encuentra internado en el hospital porteño Dupuytren. Esta semana, guardas y conductores de la línea C realizaban retención de tareas por los trenes contaminados.
Este hombre (se reserva su identidad, por el momento) recibió una descarga de 1500 voltios. "Le ingresó por el dedo pulgar y salió por el hombro", contó Christian Paletti, miembro del secretariado ejecutivo del sindicato AGTSyP (Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro), a El Destape sobre el hecho que sufrió un colega. El trabajador pertenece a Metrovías.
El hecho sucedió en el taller San José, donde se reparan las formaciones Nagoya 5000 que están circulando actualmente sobre la línea C. El gobierno porteño compró flotas de trenes contaminados con asbesto, que es un grupo de minerales que, al respirarse, las fibras pueden alojarse y acumularse en los pulmones y causar lesiones y enfermedades como el cáncer.
Tras el accidente, la empresa Metrovías comunicó que el estado de salud del trabajador "no revista gravedad" y que ya fue dado de alta. "El colaborador fue atendido inmediatamente por un profesional del Servicio Médico de la empresa que se encontraba en el lugar y posteriormente derivado por la ART al Sanatorio Dupuytrén de la Ciudad de Buenos Aires, donde luego de permanecer en observación, fue dado de alta hace instantes, ya que su estado de salud no reviste gravedad", informó la empresa que gestiona el servicio a través de un comunicado.
Los coches comprados fueron anteriormente usados para el subte en Madrid (los CAF 5000 que ya fueron retirados) y también en Japón, los Nagoya 5000 que circulan en la C. La jueza Elena Liberatori hizo lugar al amparo presentado por AGTSyP y ordenó tomar muestras de piezas y materiales para determinar si hay presencia de asbesto o amianto. En los fundamentos de la sentencia, la jueza recordó que la Resolución 823/2001 del Ministerio de Salud de la Nación prohíbe “el uso de fibra de asbesto, siendo ésta una sustancia cancerígena comprobada por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer”.
Paletti afirmó a este portal: "Metrovías apeló igual transgrediendo la normativa del fallo de la jueza Liberatori, que prohibía el trabajo con asbesto. ¡Y los mandó a trabajar igual con asbesto! Y encima se electrocutó", contó.
"En febrero de 2018 conocimos la denuncia desde el Metro de Madrid de los trabajadores muertos por enfermedades producidas por asbesto. La investigación de los trabajadores del subte, con la Secretaría de salud e Higiene, demostró que estos trenes y otras formaciones viejas como los Mitsubishi tenían asbesto. Por ese motivo en los talleres empezaron a realizar retenciones de tareas, para evitar seguir estando expuestos a estas fibras. En estos días los guardas y conductores de la línea C, en este mismo camino, hemos decidido realizar una retención de tareas de los trenes contaminados, abstenernos de prestar servicio con las formaciones Nagoya 5000 hasta que se garantice la total desabestización de los mismos", afirma un comunicado de los trabajadores difundido en el portal La Izquierda Diario. Ayer ayer se cumplió un año de la muerte de otro trabajador del subte. Ya llevan cinco muertes en los últimos nueve años.
Los trabajadores del subte están reunidos para tomar medidas en consecuencia de lo sucedido con su compañero. Podría haber paro total o retención de tareas. "Se está debatiendo, el cuadro es muy grave", afirmó Paletti a El Destape.
Precisamente ayer se cumplió un nuevo aniversario de la muerte de David Alfonso, quien falleció electrocutado mientras cumplía tareas en el taller de Constitución.
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